El informe anual de piso compartido elaborado por Idealista ha anunciado que el interés por el alquiler de habitaciones no hace más que crecer. Este año, ha habido un total de 59 millones de búsquedas en los que llevamos de 2017, incrementándose un 78,1% respecto al año anterior.
El precio de estas habitaciones ha aumentado en un 8,4% en los últimos meses hasta los 309 euros de media. Un precio que provoca que la edad de los demandantes aumente considerablemente. La falta de emancipación de los estudiantes universitarios –en 2011 eran el grueso de la demanda –sumado a los separados o divorciados, trae consigo la subida a 30 años de edad media de los buscadores de habitaciones. El perfil se adecua al del año pasado: viven en el centro de las grandes ciudades, no fuman y ni tienen ni admiten mascotas.
La edad media de los habitantes de un piso compartido varía en función de la zona geográfica. En las ciudades del norte es más fácil que la media supere los 30 años, mientras que en dos capitales estudiantiles como son Granada y Salamanca, la edad baja hasta los 25 y 26 años respectivamente.
El mayor incremento de precios se ha registrado en Palma de Mallorca (23, 9%), seguido por Málaga (23,1%). Solo baja en Cáceres (5,6% más barato) y en Soria. Barcelona se contempla como la ciudad más cara para vivir en una habitación, ya que se solicitan 426 euros de media. En Madrid el precio es de 377 euros. Según Inside Airbnb, un 38% de las búsquedas en Madrid son para habitaciones privadas con un total de 4.856.
Además, en el 75% de los pisos compartidos conviven ambos sexos, mientras que en el 22% sólo viven mujeres y en el 3% sólo hombres.
Por ciudades, los puntos con mayor oferta de habitaciones son Madrid y Barcelona (que acumulan el 34,9% y el 18,6% de todas las habitaciones que se anuncian en España). Les siguen Valencia, con el 8,4% de los anuncios, Sevilla (4,8%) y Granada (4,8%). A cierta distancia están las ciudades de Salamanca (3,4%), Valladolid (1,8%) y Zaragoza (1,8%).
Marta Martín Gómez