El militar fallecido este martes de un disparo en el Mando de Adiestramiento y Doctrina del Ejército de Tierra (MADOC) en Granada pudo haberse suicidado. Esa es la principal línea de la investigación que sigue la Policía judicial que investiga el caso, tras haber descartado la intervención de terceras personas en el suceso.
En cualquier caso, las investigaciones sobre el suceso continúan y el juez ha decretado el secreto de sumario, según han confirmado fuentes del Ejército de Tierra a Estrella Digital.
El militar, identificado como A.T.P. por medios locales, se encontraba solo en la entrada del acuartelamiento de Capitanía General, situado en el centro de la ciudad, donde realizaba labores de vigilancia. Sobre las 10 de la mañana, sus compañeros escucharon un ruido y cuando acudieron a la sala encontraron al hombre en el suelo con un disparo. Los equipos sanitarios no pudieron hacer nada por su vida. Su cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde se le practica la autopsia.
El soldado, cuya edad no ha trascendido, tenía un compromiso de larga duración con el Ministerio de Defensa, que cumplía a los 45 años.
Paula Pérez Cava