Expertas internacionales han alertado este lunes en Valencia de la «invisibilidad» de las niñas en los conflictos bélicos, víctimas de abusos sexuales y traumas, y han reclamado una atención específica y el desarrollo de una nueva jurisprudencia que dé respuesta a su situación.
Así lo ha puesto de manifiesto la profesora de Derecho Internacional y titular de la Cátedra Jean Monnet de Derecho de la UE en la Universidad de Cantabria, Rosario Ojinaga, en declaraciones a los periodistas antes de participar en la jornada sobre las «Niñas soldado» organizada por la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados (FVEA) y la Universidad CEU Cardenal Herrera y que ha inaugurado la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra.
Según Ojinaga es necesario «adaptar a través de la interpretación, de los desarrollos jurisprudenciales y de los procedimientos de la Corte Penal Internacional la aplicación de las normas a las nuevas necesidades» de los conflictos actuales.
Por su parte la miembro de Naciones Unidas y profesora de la Universidad CEU Cardenal Herrera Ruth Abril ha señalado que la definición del «niño soldado» olvida al sexo femenino y sus peculiaridades, a pesar de que las menores «son más vulnerables, antes, durante y después del conflicto».
«Unas niñas que por el hecho de ser mujeres y menores de edad van a ver que sus derechos fundamentales en muchas ocasiones han sido violados», ha añadido Abril, un problema al que se añade el hecho de que esta vulneración de sus derechos ha sido «invisibilizada».
«Antes las mujeres eran reclutadas para ser esclavas sexuales o para casarse con los comandantes. No eran consideradas niños soldado, y por ello no podían beneficiarse de los programas de desarrollo, movilización y reinserción«, ha lamentado.
Para Abril, es necesario «dar voz» a estas menores y «sensibilizar» a la sociedad para que «nos concienciemos de cuál es la situación y seamos capaces de aportarles una solución adecuada a su situación».
«Cuando los políticos, los que negocian la paz, los que están pensando en hacer proyectos de desmovilización o de reinserción se olvidan de las niñas, no se les ofrece un tránsito hacia la vida social y civil adecuado» y muchas veces son rechazadas por la familia y su entorno, ha lamentado.
El problema, según Abril, es que las niñas «no son una prioridad» para los políticos cuando finaliza el conflicto, cuando se firma la paz es un tema de «derechos humanos» y si hay proyectos son para los varones.
Actualmente, según los informes de Naciones Unidas, hay unos 300.000 niños y niñas soldados en 17 países, la mayoría de casos en Colombia, donde las FARC no reconocen la existencia de niños y niñas soldado, y en África.
EFE