Se ha quitado los guantes, se ha remangado y ha bajado al fango opositor. Rafael Hernando le ha amargado, al menos un tanto, la victoria a Pedro Sánchez con sus afirmaciones. “Ir a Moncloa por la puerta de atrás, qué vergüenza”, le ha dicho.
También le ha afeado el apoyo conseguido de los dos diputados de Bildu. “Hay que tener un cuajo muy grande y una vergüenza muy grande. No sé si usted va a ser capaz de mirar a las víctimas de ETA”, le ha espetado Hernando.
Sánchez contestaba. “No voy a permitir que usted utilice el argumento del terrorismo con una organización que ha sufrido el zarpazo de ETA”.
Sobre los apoyos del independentismo catalán al PSOE, Hernando ha mostrado también su temor. “Ni inmunidad, ni impunidad, ni indultos. Pacte usted lo que pacte”. A esto el nuevo presidente ha asegurado que “este gobierno quiere que Cataluña esté en España y escuchará a Cataluña”.
El portavoz popular ha ironizado sobre los Presupuestos Generales del Estado, aprobados por el PP y que ahora Sánchez se compromete a respetar. “Eso se llama parasitismo”, acusa Hernando.
A todos estos reproches Pedro Sánchez le ha respondido así: “Si la oposición que hacen ustedes es la que usted ha manifestado en la tribuna están condenados a la irrelevancia”.
La dureza de Hernando es un anticipo de la postura que mantendrá el PP con sus 137 escaños durante el periodo socialista.
Redacción