Poco después de las nueve de la mañana del 21 de agosto de 2017, es decir tres días después del atentado yihadista en Las Ramblas, una mujer estacionó su coche en el aparcamiento situado frente a un macro centro comercial que se encuentra a las afueras de Sant Pere Molanta, un pequeño municipio del Penedès, al sur de Barcelona y muy cercano al termino municipal de Subirats donde 8 horas después acabaría siendo localizado y abatido el terrorista más buscado: Younnes Abouyaaqoud.
Cuando se disponía a cerrar con llave el turismo, un hombre se le abalanzó y trató de robarle el coche. La mujer, en un acto reflejo, se revolvió, se resistió como pudo y empezó a gritar. El asaltante, desconcertado por la situación, cejó en su empeño y emprendió la huida a pie.
La mujer no le identificó
Era Younnes Abouyaaqoub. Pero la mujer no le identificó en aquel momento aunque la foto del terrorista huido ya había trascendido a la opinión pública. En consecuencia, cuando se presentó en el lugar de los hechos la patrulla de los Mossos d´Esquedra para atender la denuncia de la víctima y le tomaron declaración, la denunciante se limitó a dar detalles de lo ocurrido y describir el aspecto, pero sobre todo, la indumentaria del agresor: una camisa de color celeste y un pantalón rojo.
Los Mossos, tampoco…
De forma poco comprensible, los agentes actuantes, que como el resto del policías en Catalunya estaban en alerta máxima para la localización de Abouyaaqoub en el marco de la “Operación Cronos”, no relacionaron al agresor con el yihadista huido. Por lo tanto ni si quiera le llegaron a mostrar entonces a la mujer la foto del sospechoso a pesar de que ella se refirió al agresor como un joven alto, delgado y de rasgos árabes (características compatibles con el conductor de la furgoneta de Las Ramblas).
Lo tuvieron muy cerca
Fue 8 horas después, cuando los mossos interceptan en Subirats a Abouyaaqoub, cuando los investigadores empiezan a relacionar a ese individuo con el asaltante del parking.
Cuando fue tiroteado por los Mossos, Abouyaaqoub vestía camisa celeste y pantalón de color marrón,que perfectamente se podía confundir con el color rojo. Horas después, los Mossos le mostraron, esta vez si, la foto del terrorista y la mujer le reconoció escandalizada. También a posteriori, los agentes obtuvieron la imágenes del asesino en el aparcamiento del centro comercial.
El atestado se centra en un testigo
El atestado policial que resume todas las incidencias previas a la detención del conductor de la furgoneta que arrasó a decenas de personas en Las Ramblas no recoge este episodio. Los informes se circunscriben a la alerta comunicada por un testigo:
“En el día de hoy, -(21 de agosto de 2017)- a las 15:36 horas, se ha recibido llamada en el Centro de Emergencias de la Generalitat de Catalunya 112, de un testigo que alertaba sobre la posible presencia de la persona fugada, presunta autora material de los atentados de La Rambla de Barcelona, Younnes Abouyaaqoud, en la carretera C-243B, en el punto quilométrico 16,5, cerca de la población de Subirats (Barcelona). El testigo que comunica se identifica como Lilian B., desde el número de teléfono 661XXXX”.
Así se inicia el atestado rubricado por los investigadores a las 19:00 horas de aquel día 21 de agosto (tres horas después de la interceptación de Younnes Abouyaaqoub). Según consta en los documentos policiales que maneja este medio digital, “se redacta la presente diligencia para hacer constar de forma cronológica todas las gestiones realizadas por esta Unidad, en relación al hallazgo del señor, las circunstancias del mismo y los hechos acaecidos en relación”. En esa “cronología” no aparece mención alguna al incidente de horas antes en el parking del centro comercial de Sant Pere Molanta.
Francisco Mercado/Carlos Quílez