Rivera y Arrimadas han visitado hoy la localidad barcelonesa de Alella, en cuyo ayuntamiento luce un lazo amarillo y una pancarta con el lema «libertad presos políticos», en plena polémica por la simbología independentista en instituciones y en el espacio público catalán.
Durante la visita a esta población, Rivera y Arrimadas han retirado lazos amarillos colocados en una valla de protección de la calle, ante los aplausos de algunos simpatizantes y los abucheos e insultos de varios vecinos.
En declaraciones a los medios, Rivera ha explicado que hoy han querido «limpiar el espacio público» de simbología independentista e ideológica como hacen otros muchos ciudadanos, una acción que mantendrán hasta que Sánchez aparque la «pasividad» y «reaccione» ante esta «ocupación» garantizando la convivencia y la neutralidad.
«La Cataluña de todos necesita espacio de todos» en aras de la convivencia y «eso tiene una palabra: neutralidad», ha reivindicado el líder de Ciudadanos.
Según Rivera, muchos catalanes están retirando lazos amarillos cuando esto debería hacerlo el Estado, porque estamos en una «situación de excepción en la que el Estado no hace su trabajo y el Gobierno mira hacia otro lado»
El presidente de Ciudadanos, además, ha criticado que el Govern de Quim Torra «apoye a los comandos separatistas que ponen simbología» independentista en lugar de contribuir a la convivencia entre los catalanes.
«No habrá convivencia hasta que no haya neutralidad en el espacio publico y le pido a Torra que rectifique», ha instado al president.
Arrimadas, por su parte, ha denunciado que los independentistas quieran «patrimonializar» un espacio público que es de «todos» con unos símbolos que «excluyen a más de la mitad de los catalanes».
También advertía de que esta «ocupación» del espacio es un «motivo de conflicto social».
Después de que Rivera y Arrimada retiraran los lazos amarillos, algunos vecinos han vuelto a ponerlos.
Redacción