Este programa fue puesto en marcha en 2019 por la Organización Médica Colegial (OMC) consciente de que estos profesionales, al igual que la población en general, pueden padecer problemas mentales y/o adicciones que pueden afectar a su práctica profesional y, por tanto, a la seguridad de los pacientes.
Con motivo de su veinte aniversario, la Fundación para la Protección Social de la OMC ha celebrado hoy una jornada, en la que el presidente de los Colegios Médicos, Serafín Romero, ha señalado que el PAIME «debería estar en el Boletín Oficial del Estado con el reconocimiento de utilidad pública”.
Según el último informe, de 2016, este programa atendió a 323 médicos y el trastorno mental fue el principal motivo de la demanda de ingreso en el mismo (75,8 %), seguido de problemas de alcoholismo (9,3 %) y drogas (7,3 %). El 7,7 % de los casos presentaba una patología dual.
El colectivo más afectado son los médicos de familia (40 %), seguido de anestesistas (6,1 %) y pediatras (5,5 %). El porcentaje de médicos mujeres afectadas por problemas de salud mental (52,5 %) es mayor que el de hombres (47,5 %).
Más del 92 % de los profesionales atendidos se ha recuperado y se ha incorporado al ejercicio de la medicina.
Por su parte, el doctor Jaume Padrós, presidente del Colegio de Médicos de Barcelona, ha reconocido que uno de los principales obstáculos para la detección de casos es la tendencia entre el colectivo médico a ocultar sus problemas de salud mental: “los más estigmatizados con nosotros mismos somos los médicos».
Redacción