Los miembros de la Coordinadora federal tendrán sobre su mesa un informe de la dirección que plantea que Llamazares -portavoz de la corriente Izquierda Abierta- ha incurrido en un «incumplimiento manifiesto» de los estatutos al impulsar «una opción electoral» y promover «otro partido» que ha declarado su voluntad de competir con IU en las elecciones europeas.
El informe califica los hechos como una falta grave o muy grave y sustenta esa acusación en el anuncio que la plataforma Actúa realizó el pasado 15 de diciembre al comunicar «su intención firme de presentarse a las próximas elecciones europeas, autonómicas y municipales».
Ya en aquel momento, el coordinador federal de IU, Alberto Garzón, calificó de «muy grave» que «haya personas que siendo de IU monten un partido político con el que tengan aspiración de competir» con la formación de la que forman parte, recordó que sus estatutos penalizaban el «transfuguismo» y exigió a Llamazares explicaciones.
La relación se tensó aún más y el portavoz de Izquierda Abierta y diputado en Asturias se negó a dar ningún tipo de explicación a Alberto Garzón hasta que retirara públicamente esa acusación.
Pocos días después se filtraban unas grabaciones de una reunión de Actúa en mayo, en las que se escuchaba a Llamazares mostrar su disponibilidad para encabezar una lista electoral de la plataforma.
Aunque Llamazares explicó que los audios eran de una reunión interna de hace más de seis meses y que después ya confirmó su intención de encabezar la candidatura de IU en Asturias en las próximas autonómicas, el informe que estudia mañana la dirección cita también esas grabaciones para probar el incumplimiento de los estatutos.
Llamazares ha dimitido de todos sus cargos federales en IU, pero hasta ahora ha mantenido su intención de ser candidato autonómico en Asturias y cuenta con el respaldo de Izquierda Abierta y de la dirección asturiana.
No obstante, la dirección federal podría frenar sus planes y plantear medidas disciplinarias que impedirían que pueda a optar a ser cabeza de lista en Asturias, como pretende.
Su futuro está pendiente del debate que se produzca en la reunión de mañana, que arrancará con la presentación por parte de Alberto Garzón de un informe político titulado «La izquierda para un país que lucha», en el que abordará la estrategia que debe poner en marcha la formación ante el próximo ciclo electoral y tras el fracaso en las elecciones andaluzas.
Tras Garzón, el coordinador general de IU Andalucía, Antonio Maíllo, realizará un análisis sobre la situación política en esta comunidad y la formación del nuevo Gobierno tras el pacto entre PP, Cs y Vox.
Tras estas intervenciones que se realizarán en abierto, el debate proseguirá a puerta cerrada y será entonces cuando se analice si se deben o no adoptar sanciones contra Llamazares.
Redacción