El hombre, que ha sido detenido tras una investigación iniciada en 2015 y en la que han colaborado las policías alemana y suiza, vía Interpol, también presumía en las redes de mantener relaciones sexuales con su hija menor de edad, sin que realmente esos abusos se llegaran a producir.
El detenido utilizaba una red privada de intercambio de archivos a la que sólo se podía acceder a través de una invitación previa, y vulneraba las redes inalámbricas de sus vecinos para realizar conexiones de un modo seguro y garantizar su anonimato.
A finales de 2015, tras recibir una comunicación de la policía suiza, vía Interpol, que alertaba de que habían detectado a un usuario en España con multitud de archivos de explotación sexual infantil a disposición de sus contactos en internet, la policía española inició una investigación aunque no logró localizarlo por las fuertes medidas de seguridad que adoptaba.
Meses después, llegó otra comunicación de la policía alemana sobre un usuario de esa misma red y, con toda la información y un software específico, se consultó el historial de las conexiones y las direcciones IP utilizadas. Entonces, se averiguó que este usuario había accedido a las cuentas del primero, por lo que se concluyó que era el mismo sujeto.
La Policía explica que en el curso de las investigaciones se identificaron otras tres cuentas de las que hacía uso con el mismo fin de realizar intercambios de material audiovisual con pedófilos de todo el mundo.
En una operación paralela se detuvo a otro hombre en Canarias, al que detectaron conversaciones con el ahora detenido, en las que se referían pormenorizadamente a episodios de violaciones a diversos menores de edad, uno de ellos de 9 años.
La Policía logró averiguar la identidad del hombre y su actividad oculta en las redes sociales y foros de internet de temática sexual infantil, y conocieron sus comentarios en los que presumía de «su amor prohibido con una hija menor», a la vez que compartía consejos sobre como iniciar a las menores en el amor filial-paterno.
Finalmente se logró dar con su paradero exacto en Valladolid y se le detuvo. Tras entrar en su domicilio se encontraron en un disco duro 40.646 archivos de material de explotación sexual infantil de extrema dureza, además de su teléfono móvil, desde el que accedía a los foros en los que efectuaba la publicación de los comentarios de incesto.
Los investigadores, según el comunicado de la Policía, han comprobado que los abusos sexuales a su hija menor, relatados en los foros, no se habían llegado a producir.
Redacción