En declaraciones a la Ser, Calvo se ha referido al último asesinato de una mujer de nacionalidad sueca en Las Palmas de Gran Canarias, cuyo marido ha sido detenido, y que si se confirmara el crimen machista sería la víctima 17 de este año, de las que solo una había denunciado.
«Pedir que vayan a una comisaria es mucho para mujeres que a veces intentan saber lo que les pasa», ha dicho Calvo, pero ha recordado que pueden acudir a los Servicios Sociales de los ayuntamientos para hablar con un especialista. «Lo que queremos es que denuncien».
Para Calvo, cada asesinato machista «da la medida de la tragedia» de lo que es la violencia de género, «el problema más grave en la agenda de este país».
«Si el problema más grave no es cómo se asesina a las mujeres por el hecho de serlo, ya nos tendríamos que preguntarnos lo que es grave», ha aseverado.
«Desgraciadamente la ultraderecha ha venido a negar esto; diluir el concepto de violencia de género es peligrosísimo y fue un acuerdo de Estado», ha dicho Calvo, quien ha opinado que «negar esa realidad es debilitarnos para combatirla».
La vicepresidenta ha discrepado con la decisión de trasladar a un juzgado de violencia sobre la mujer el caso del suicidio asistido de María José Carrasco, con ayuda de su marido Ángel Hernández.
«No ayuda nada» investigarlo como violencia de genero, ha dicho Calvo, quien ha asegurado que los jueces pueden interpretar la ley, pero en este caso se ha expresado el deseo de la mujer de morir y habría quedado resuelto si se hubiera aprobado una ley de eutanasia.
Redacción