«Señor Casado, el dolor no entiende de ideologías», ha subrayado Rivera al recordar que cuando su abuela murió de cáncer, necesitó de cuidados paliativos en los últimos días y por un trance así pasan muchas familias.
Por eso ha pedido a Casado que «rectifique» en su negativa a regular la eutanasia porque es una cuestión que hay que regular.
Según, ha dicho, muchos votantes del PP están a favor de que se regule. «¡Estamos en el siglo XXI!», ha exclamado Rivera, entre las protestas de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, que le han recordado que esa ley se votó en el Congreso y no prosperó, entre otras cosas, por la abstención de Ciudadanos.
Casado ha respondido que no quiere que se produzcan situaciones como las del Reino Unido, en referencia al caso de unos padres que «se encadenaron en un hospital porque no querían que desconectaran a su bebé», y ha asegurado que el PP ya ha sido «pionero» en regular la muerte digna en las comunidades de Madrid, Galicia y Castilla y León.
Tal como ha explicado, esta posibilidad está regulada a través del testamento vital, para que no haya encarnizamiento terapéutico, porque una cosa es la sedación y otra la «eutanasia activa», ha advertido.
Y ha recriminado a Rivera que meta este tipo de cuestiones «morales» en campaña electoral para «rascar unos cuantos votos».
Por eso, ha instado a consultar con el Comité de Bioética para que no haya casos como el del Reino Unido u otros producidos en Holanda, y ha añadido que lo que es «impresentable» en el caso de María José Carrasco, la mujer a la que su marido ayudó a morir, es que «estuviera años esperando la prestación por dependencia».
Redacción