En un artículo de opinión que publica el diario digital Vilaweb, el presidente Torra pide «a los partidos que quieren un futuro libre para Cataluña no abaratar el sueño» y vuelve a descartar la posibilidad de unas elecciones catalanas anticipadas como respuesta institucional a la sentencia.
«Ahora no es momento de pensar en las elecciones que puedan venir», afirma Torra, sino «en las futuras generaciones», ya que «es por ellas, ha dicho, que hace falta tomar las decisiones de hoy» teniendo presente que «la calidad de nuestros sueños de hoy determinará la calidad de vida que tendrán nuestros hijos y nietos».
El presidente de la Generalitat invita a los partidos catalanes a «comprometerse» en hacer realidad los sueños con «propuestas concretas que devuelvan la confianza y la fuerza a todos», es decir, aclara, «tenemos que hacer la República Catalana sin excusas ni miedos».
Según Quim Torra, «es muy posible que la sociedad catalana se vuelva a movilizar para mostrar su rechazo a las sentencias», y en este supuesto, hace otro llamamiento para que las movilizaciones sean hechas «como siempre las hemos hecho, con civismo, respeto, de forma pacífica y determinada».
«No podemos caer en ningún caso en las provocaciones que puedan llegar», añade, puesto «que ya hemos visto que los adversarios de la libertad de Cataluña nos querrían violentos y agresivos» aunque «nosotros sabemos que la única forma de ganar este combate es en pie de paz y con la firmeza de las convicciones democráticas».
El presidente catalán reconoce que «hemos recorrido caminos difíciles últimamente» y si bien «no hemos retrocedido» tampoco hemos avanzado lo que hacía falta», motivo por el que «ahora es el momento de retomar el camino».
«Retomemos la confianza, sin engaños ni espejismos, pero también sin renuncias ni pugnas estériles», subraya el presidente Quim Torra, que insiste sobre la sentencia «a los gobernantes y dirigentes del referéndum» del 1-O de 2017 que la misma puede ser una oportunidad para «dar una respuesta que nos haga mejores, más fuertes y libres».
Puede abrir, explica, «una nueva etapa en la que retorne la dinámica de la confianza que nos ha llevado a los mejores momentos de este proceso emancipador» y en la que «la generosidad y el sentido de país vuelvan a pasar por delante del interés de los partidos y las batallas para hegemonías que sólo servirían para gestionar una autonomía vigilada y miserable».
«No ampliaremos ninguna base pidiendo permiso y esperando que se nos de», considera Torra antes de recalcar que «sólo la defensa de la democracia y de la voluntad popular nos puede llevar al crecimiento de una base de consenso aún más amplia».
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