Además de a él y a sus 10 familiares, De la Mata propone sentar en el banquillo a tres presuntos testaferros que formarían parte de la red con la que, según él juez, esta trama se ha dedicado desde los años 80 a «ocultar, transformar y blanquear» en distintos países europeos «fondos ilícitamente depredados del Tesoro nacional sirio».
En el auto de transformación de las diligencias en procedimiento abreviado, el magistrado de la Audiencia Nacional les imputa delitos de blanqueo y de asociación ilícita o pertenencia a organización criminal.