El juzgado mercantil número 11 de Barcelona ordenó el pasado viernes el cierre de la web «Consum estratègic», abierta por la ANC para fomentar la compra de productos de empresas afines al independentismo, e instó a esta organización a no llevar a cabo ninguna otra actuación que vaya en esta dirección.
La titular de este juzgado estimó así parcialmente las medidas cautelares que le había solicitado la patronal catalana Foment del Treball, que pidió la retirada de la campaña previo a la presentación de una demanda por considerar que animaba a una conducta anticompetitiva.
En un comunicado, la ANC ha valorado que el auto también supone un precedente «grave» por lo que se refiere al derecho a la libertad de expresión.
Esta resolución «se enmarca dentro de la interpretación restrictiva de los derechos civiles que hacen muchos tribunales españoles, que contrasta con las resoluciones europeas respetuosas con una interpretación amplia del derecho a la libertad de expresión como base esencial de una sociedad democrática», ha argumentado la Assemblea.
Por el momento, la respuesta de la ANC es este comunicado aunque los servicios jurídicos de esta entidad estudian qué harán ante esta resolución judicial.
El auto sobre la campaña «Consum Estratègic» se basa en una sentencia del Tribunal Europeo de los Derechos Humanos del caso Willem contra Francia de 16 de julio del año 2009, en la que un alcalde proponía un boicot a todos los productos israelitas, «que no tiene nada que ver con este caso», según la ANC.
La resolución de juez entiende que la campaña supone un «boicot» a determinadas empresas, en el marco de «una campaña de miedo».
Estos conceptos «no se mencionan en la documentación de la web de la campaña, pero sí en los escritos de Fomento», la patronal catalana que presentó la demanda judicial en contra de «Consum Estratègic».
«En realidad, lo que promueve es la libre competencia constreñida por los grandes oligopolios a los que Fomento defiende», ha opinado la ANC.
La campaña de la Assemblea pretende, según afirma, la promoción del consumo de empresas «responsables y respetuosas con la vida política y social», y hace énfasis en aspectos como el respeto al medio ambiente, el cooperativismo, la economía circular, la responsabilidad social, la adopción de tecnología 4.0, el respeto y promoción de la lengua catalana.
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