Madrid, 9 ene (EFE).- Madrid Central, la zona de bajas emisiones puesta en marcha a finales de 2018, ha permitido alcanzar los niveles más bajos de la década en contaminación por dióxido de nitrógeno (NO2) de la ciudad, mientras que en el resto de los contaminantes la situación es similar.
El informe «La calidad del aire en la ciudad de Madrid durante 2019», presentado este jueves por Ecologistas en Acción, refleja que Madrid ha vuelto a vulnerar por décimo año consecutivo los límites establecidos en la legislación europea y los valores máximos recomendados por la Organización Mundial de la Salud.
Durante el año de funcionamiento de Madrid Central se ha producido un «notable descenso» de la contaminación con los valores más bajos para el NO2 y ninguna superación del límite legal de las partículas en suspensión, mientras que el ozono troposférico ha tenido un comportamiento similar al de otros años, ha explicado el coordinador de calidad del aire de Ecologistas en Acción, Juan Bárcena.
«La contaminación se ha reducido y Madrid Central funciona a pesar de las actuaciones del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Madrid para restarle efectividad», ha subrayado el coordinador de Ecologistas en Acción, Paco Segura.
Además, Ecologistas ha anunciado la presentación este jueves de un recurso contencioso administrativo ante los tribunales en contra del cambio en el perímetro de Madrid Central o las moratorias de paso aprobadas el pasado 26 de diciembre, que según la organización tienen la intención de «relajar Madrid Central» .
En cambio, Ecologistas cree que si se refuerzan las medidas antipolución, se puede «alejar el horizonte» de las sanciones de la Unión Europea, que tiene abierto un expediente de infracción por incumplimiento de los límites máximos de contaminación.
En 2019 sólo dos de las 24 estaciones de la red municipal -Plaza Elíptica y Escuelas Aguirre- rebasaron el límite anual de contaminación por dióxido de nitrógeno (40 microgramos por metro cúbico), «un mínimo histórico», según la organización.
Entre 2010 y 2018 hubo de promedio anual once estaciones incumplidoras, y en 2010 llegaron a las 18.
En cuanto al valor límite horario de NO2 (200 microgramos), solo una estación lo rebasó el pasado año: Plaza Elíptica, punto negro de la polución en la capital.
La única estación situada en Madrid Central, la de la plaza del Carmen, registró la mayor bajada de la capital, con 36 microgramos por metro cúbico que le han permitido cumplir la normativa por primera vez.
Aunque donde más ha mejorado la calidad del aire es en el área de bajas emisiones, Ecologistas habla de un «efecto contagio» a otras zonas de la capital, donde sin embargo la contaminación se reduce menos en estaciones periféricas como Barajas, el Pardo y Villaverde.
Ecologistas ha advertido que, pese a los buenos datos, detecta «una pérdida de eficacia» en la segunda mitad del año, que atribuyen a la llegada de Cs y PP al Ayuntamiento y a la medida de suspender las multas en Madrid Central, que echó atrás un tribunal pero que según la ONG produjo «un aumento del tráfico y redujo la efectividad» del plan.
Segura ha acusado al Ayuntamiento de acometer una «política desquiciada» para anular la eficacia de Madrid Central, «favoreciendo el uso del coche particular, propiciando una mayor permisividad, anulando las multas entre el 1 y 5 de julio, y prolongando la prórroga a los vehículos más contaminantes».
Ecologistas ha subrayado que la contaminación «mata 22 veces más que los accidentes de tráfico y provoca diez mil muertes prematuras» en España cada año, además de asegurar que el Gobierno de José Luis Martínez-Almeida debería haber aplicado antes el protocolo anticontaminación activado para este jueves y para mañana, viernes.
Pese al balance hecho este jueves por Ecologistas en Acción, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad de la capital, Borja Carabante (PP), sigue manteniendo que Madrid Central es una medida «ineficaz» porque según el concejal del PP el objetivo era cumplir los límites de la UE y no se ha logrado.
Más Madrid se ha atribuido el descenso de la polución por la puesta en marcha de Madrid Central y su portavoz adjunta, Rita Maestre, ha calificado de «incomprensible» que el Gobierno municipal de PP y Ciudadanos quiera eliminar Madrid Central, recortar el perímetro permitir el paso a más vehículos -los de pegatina C con más de un ocupante-.
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