La intervención de Sánchez ante el pleno culminará una serie de comparecencias de los demás miembros del Gobierno de coalición en las distintas comisiones de la Cámara Alta, que comenzarán a partir del próximo 13 de mayo, primero de los cuatro vicepresidentes y después de los demás miembros del Gabinete.
Además, el jefe del Ejecutivo acudirá el 5 de mayo a la próxima sesión de control que celebrará el Senado para dar así cumplimiento a su compromiso de responder a preguntas de la oposición en la Cámara Alta una vez al mes, según ha explicado el portavoz del grupo socialista, Ander Gil.
La voluntad de Pedro Sánchez y su Gobierno de volcarse en la reanudación de la actividad parlamentaria del Senado -que se reanuda hoy con su primer pleno de control durante el estado de alarma- ha sido expresada en la reunión de la Junta de Portavoces, en la que ha habido más senadores presentes que en las últimas semanas, aunque todavía alguno ha participado por videoconferencia.
En rueda de prensa, Ander Gil ha hecho hincapié en el valor que dan los socialistas al hecho de que Sánchez haya decidido acudir al pleno del Senado para una comparecencia, por segunda vez, después de la que protagonizó en diciembre de 2008; y ha recordado que el otro presidente que hizo lo mismo fue el también socialista José Luis Rodríguez Zapatero, en el año 2004.
Además de constatar que la gestión de la crisis postpandemia será seguramente el motivo central de la comparecencia del actual jefe del Gobierno, al igual que la gestión que ha llevado a cabo para frenar el coronavirus, Ander Gil ha enfatizado la voluntad de «diálogo» que en un momento como este defienden los socialistas.
Y ha recalcado que es el «liderazgo» del presidente para promover el diálogo lo que ha permitido, «desde la unidad y la fortaleza», crear un espacio de encuentro en el Congreso mediante una comisión en la que participarán las fuerzas políticas para «buscar un gran acuerdo de Estado que nos permita iniciar la reconstrucción».
También ha comparecido ante la prensa el portavoz del PNV, Jokin Bildarratz, el cual ha ratificado el apoyo de su partido al Gobierno en una gestión «tan complicada» como la de la COVID-19, y eso aunque el formato que finalmente se ha elegido, por acuerdo con el PP, para buscar el acto no sea compartido por los nacionalistas vascos.
«Nuestro mensaje quiere ser positivo; el PSOE sabe que el PNV es un partido serio, con rigor y leal», ha subrayado, apuntando que esta lealtad no quiere decir que «cuando haya algo que no compartimos, lo critiquemos».
Bildarratz ha aprovechado para señalar que el PNV considera que la evolución de la desescalada del confinamiento sería más «eficaz» si se hace de forma diferente en cada Comunidad Autónoma según sus circunstancias, y ha pedido que se respeten las competencias en este proceso sin utilizarlo para recentralizarlas.
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