Así lo ha asegurado en una rueda de prensa en la que ha anunciado su candidatura a la Alcaldía de la localidad tras la renuncia de Pastor la pasada semana, que fue arrestado por los Mossos d’Esquadra por encararse a los agentes que interceptaron el vehículo que conducía ebrio y saltándose el confinamiento.
«(Sabater y Albiol) son un sector complicado que ahora están pensando más en la revancha que en la solución», ha aseverado Guijarro, quien ha insistido en su propuesta de «gobierno de concentración» que incluya a todas las fuerzas del consistorio bajo el liderazgo del PSC, que quedó tercero en los comicios del 26M.
Según Guijarro, a pesar del resultado electoral, los socialistas, gracias a su rol «central y catalizador», deberían continuar comandando el Ejecutivo municipal porque son «los únicos capaces de hilvanar una solución de consenso», a pesar de que el PPC tenga casi el doble de concejales.
«Albiol, desde su posición, no lo puede hacer», ha sostenido, antes de celebrar que el líder popular haya «aplaudido» la propuesta de gobierno de concentración y de remarcar el papel del PSC como «eje central de la ciudad, capaz de tejer complicidades entre todos los grupos».
Por eso, ha garantizado que únicamente renunciaría a la Alcaldía en pro de «un consenso mayor», aunque ha alertado que, a su juicio, «es bastante difícil que posturas tan alejadas como la de Albiol y Sabater puedan llegar a un acuerdo de unidad».
«Pero si alguien es capaz de tejer complicidades suficientes como para tener la unanimidad de 27 concejales, no será el PSC el que ponga palos en la rueda», ha apostillado.
Asimismo, ha subrayado que «no es el momento de jugar al Risk ni de estrategias, sino de la política de consensos», por lo que ha pedido a sus contrincantes «evitar lógicas partidistas y personalismos».
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