El acuerdo internacional entre España y el Reino Unido en materia de fiscalidad, protección de los intereses financieros y lucha contra el fraude y la evasión de impuestos en relación a Gibraltar ya pasó el dictamen de la comisión de Exteriores y hoy ha sido debatido en el Congreso, que votará mañana su convalidación.
El acuerdo también deberá ser aprobado por el Senado, por lo que según cálculos de Exteriores su ratificación podría retrasarse hasta el próximo mes de octubre.
Hoy, en el debate del Congreso, el diputado socialista Alfonso Gómez de Celis ha puesto en valor un acuerdo que, ha dicho, convierte a Gibraltar en un «aliado para luchar contra el fraude fiscal».
Con este pacto, ha asegurado el diputado, «eliminamos a Gibraltar del GPS de defraudadores, delincuentes y corruptos».
Por eso, Gómez de Celis ha dicho no entender que «la ultraderecha y la derecha no aprueben este convenio».
Por parte del PP, la diputada Valentina Martínez ha calificado de «descorazonador» que el Gobierno eluda la soberanía de Gibraltar en el acuerdo fiscal con el Reino Unido.
Y ha lamentado que el Ejecutivo de Pedro Sánchez «desaproveche» la oportunidad abierta en las negociaciones de la relación futura con Gran Bretaña para avanzar en la soberanía de Gibraltar.
La diputada ha remarcado que el PP «nunca renunciará a que Gibraltar sea una parte de España».
En una línea similar, el diputado de Vox Alberto Asarta ha subrayado que esta era una oportunidad única para acabar con una situación colonial «insólita en Europa».
«Es una pena perder esta oportunidad para hacer valer los derechos de España. La colonia de Gibraltar está en un aprieto financiero que no la va a sacar ni el FMI, porque no es un estado soberano, ni la UE, porque no es territorio comunitario», ha dicho.
Asarta ha pedido al Gobierno que, al menos, exija conversaciones para que España recupere la integridad territorial. «No daremos respaldo a que España consienta por más tiempo esta anómala situación colonial», ha concluido.
Estrella Digital