El objetivo es incrementar el nivel de cumplimiento de las medidas anticovid y evitar las situaciones que favorezcan los contagios, han explicado en rueda de prensa este sábado las conselleras de Administraciones Públicas y Modernización, Isabel Castro, y la de Salud y Consumo, Patricia Gómez.
El Govern balear decidió hace unas semanas establecer cuatro niveles de alerta, de 0 a 4, según la gravedad de la situación epidemiológica de cada isla: Mallorca está a día de hoy en el 4 (riesgo extremo), Menorca en el 3 (riesgo alto) e Ibiza en el 2 (riesgo medio). El Govern ha anunciado que el martes próximo Formentera pasa del 1 (situación de control) al 2 (riesgo medio).
La decisión de endurecer las sanciones en el nivel 4, que aprobará el Govern balear en su reunión del lunes, pretende reducir la propagación del virus -Baleares tiene la incidencia acumulada más alta de España- y evitar las situaciones de posibles contagios.
A partir de la próxima semana, las infracciones leves pasan a ser graves, con multas de 3.001 euros a 60.000, y las graves serán muy graves, con sanciones de 60.001 euros a 600.000.
No llevar mascarilla por la calle será sancionable con 100 euros, como establece la normativa estatal, pero incumplir los límites de aforo o organizar fiestas o reuniones que no respeten las medidas sanitarias pueden multarse con hasta 600.000 euros, así como el cierre de establecimientos hasta un periodo de tres años.
Como ejemplo, la consellera Castro ha señalado que superar los aforos de un máximo permitido de 15 personas será considerado muy grave, al igual que un establecimiento de restauración de Mallorca continúe abierto más allá de las seis de la tarde.
Desde que entró en vigor en julio este decreto ley sancionador, hasta el 7 de septiembre, se han registrado en Baleares 5.532 denuncias en Baleares, de las que 4.870 corresponden a particulares y 662 a establecimientos.
Las denuncias más habituales se refieren a los aforos, la cartelería de los establecimiento, no llevar mascarilla los camareros o incumplimiento de la distancia social.
La consellera de Salud ha señalado que, a pesar de los esfuerzos de la ciudadanía, que «cumple de manera muy correcta» con las normas y recomendaciones para evitar los contagios, todavía hay situaciones que suponen un «grave peligro» para la salud pública.
El Govern pondrá en marcha operativos conjuntos de inspección específicos con motivo de las fiestas navideñas que vigilarán, especialmente, la actividad de comercios, centros comerciales, establecimientos de restauración y bares para garantizar que se respeten las normas.
L.N.