El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha asegurado que si el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, preside la mesa bilateral con Cataluña él pedirá que se active la que viene recogida en el Estatuto de Autonomía andaluz (comisión bilateral) y con los mismos representantes.
«Si en Cataluña se sientan seis ministros y el presidente, en Andalucía se tiene que sentar Sánchez y seis ministros», ha dicho Moreno en una entrevista en Onda Cero.
Ha criticado que haya una mesa con Cataluña «donde se negocien privilegios» para un territorio en detrimento de otros y ha lamentado que Sánchez esté «dispuesto a poner la chequera encima de la mesa» para «pacificar» su situación parlamentaria.
Ha insistido en que «si hay una mesa bilateral con Cataluña, Andalucía quiere una mesa bilateral», como ya le expresó en su reunión de hace unos meses, pero que ahora pedirá formalmente cuando se produzca la reunión con el presidente catalán, Pere Aragonés.
Ha opinado que la menor intensidad en la reclamación independentista no se debe a Sánchez sino a que «han chocado contra un muro de hormigón» porque se trata de una «utopía», lo que ha provocado «un tropiezo traumático con la cruda realidad» que ha llevado a los independentistas «a la melancolía».
Por otra parte, respecto a la rebaja de los impuestos de la electricidad, ha criticado que Sánchez haga «siempre» los anuncios «sin previo diálogo» con las comunidades y teme que no habrá «ningún tipo de compensación» a las comunidades por las tasas cedidas.
El presidente de la Junta ha reclamado «una reflexión profunda» sobre el modelo energético y ha pedido un plan «real» en el que se activen las renovables y haya zonas de evacuación a través de red eléctrica, ya que por ejemplo Andalucía no tiene las canalizaciones necesarias para distribuir más energía solar.
Ha calificado de «plan efectista» el de poner un «tope» a los beneficios de las compañías eléctricas, ya que ha advertido de que las empresas cotizadas en bolsa sólo funcionan si sus accionistas tienen dividendos.
Moreno ha abogado por una mayor liberalización del sector, donde haya más competencia, sobre todo en la producción y, aunque no cree que se trate de un oligopolio, sí ha dicho que «no es un régimen competitivo puro».
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