Este lunes, el expresidente ha buscado despejar el debate. En una entrevista con COPE ha afirmado, según ha dicho con «rubor» y por «si se considera necesario», que apoya a Casado y desea que sea presidente del Gobierno porque «es mejor para España».
Ha querido aclarar Aznar que sus llamadas a la unidad no eran en clave interna, sino que lo que perseguían era aglutinar el voto en las siglas del PP ante un centroderecha dividido.
La presencia del expresidente el pasado sábado en Valladolid pretendía dar un impulso más a la campaña de Alfonso Fernández Mañueco a las elecciones del 13 de febrero en Castilla y León, pero el eco de su discurso ha retumbado sobre todo en clave interna.
Afirmó, por ejemplo, que le dicen, «tenemos que ganar para que vaya no sé quién a la Moncloa», para añadir que la pregunta es «para hacer qué».
En forma de consejo a Mañueco, dijo que para ser un gran líder hay «ser capaz de rodearte de los mejores» y sostuvo que si hay muchas personas que se agarran a «populismos mentirosos», es porque «no tienen un referente fuerte en el cual confiar».
Ante la lectura de que Aznar estaba mandando un mensaje a Casado, el domingo fuentes de la dirección nacional enmarcaron sus palabras en la normalidad y defendieron que «hay proyecto de sobra».
Y durante su mitin en Ávila, el propio Casado quiso despejar cualquier duda cuando afirmó que el proyecto del PP es que «los españoles puedan hacer realidad su proyecto», reivindicó su reformismo y expuso su programa.
Además, Aznar ha sostenido que el choque entre Génova e Isabel Díaz Ayuso por el control del PP madrileño «no debería haber existido nunca» y ha pedido que se zanje «cuanto antes».
Casi al tiempo, la presidenta madrileña ha negado en una entrevista con Antena 3 que Aznar hubiese enviado «recaditos» sobre ella a Casado. «No tengo que ver con cada cosa que ocurre en política en este país», ha argumentado.
Según Díaz Ayuso, lo que sí hizo Aznar en Valladolid fue «sentar esa cátedra» e invitar a pensar al PP para que sepan qué quieren hacer. Y ha apuntado que el expresidente «no es un florero», sino un político, por lo que ha recomendado que «si alguien quiere un discurso de palabras vacías, no le llame».
Desde Guijuelo, en Salamanca, Casado se ha limitado a agradecer que tanto Aznar como Mariano Rajoy participen en la campaña y ha apuntado que el PP ya trazó su proyecto para España en la convención nacional.
Otras voces del PP, como el alcalde de Madrid y portavoz nacional del partido, José Luis Martínez-Almeida, o la portavoz en el Congreso, Cuca Gamarra, han recalcado que el expresidente ya ha dejado «clarísimo» que apoya al líder del PP. EFE
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