La Comisión de Sanidad y Consumo del Congreso votará este lunes el dictamen que propone regular el cannabis terapéutico para paliar el dolor y los efectos de los tratamientos de algunas patologías y que ya recibió el visto bueno de la mayoría de los grupos parlamentarios, excepto PP y Vox.
Junto al dictamen, los diputados se pronunciarán además sobre los votos particulares que han presentado los partidos -excepto PSOE y PNV-, también los que apoyaron el informe final de la subcomisión de cannabis medicinal la semana pasada, que salió adelante con el único rechazo de la derecha y la abstención de ERC y EH Bildu.
Es el caso de Unidas Podemos, que vuelve a insistir, como ya hiciera en la subcomisión, en abogar por el uso de las sumidades floridas del cannabis -los cogollos-, además de extractos y preparados estandarizados y que, a diferencia de éstos, que se toman por vía oral, se consumen por vaporización o inhalación, de efectos más rápidos.
Respecto a las flores, la propuesta inicial del PSOE y después enmendada por los grupos las excluía; después, el texto definitivo de la subcomisión salió adelante con una mención a «la posibilidad de valorar los cogollos o «preparados de otro tipo que estén disponibles en países de la UE» para desarrollar proyectos experimentales «cuando sean solicitados».
Unidas Podemos quiere además que los nuevos medicamentos se dispensen en toda la red de farmacias, «sin perjuicio de que otros comercios también puedan obtener licencias de dispensación»; sobre ello, el informe abría la puerta a las farmacias comunitarias, pero dejando claro que «preferentemente» deben ser las hospitalarias.
De la misma forma, apuesta por el autocultivo, en lo que España «tiene una dilatada historia ampliamente documentada» y que ayudaría a aumentar las vías de acceso, reducir los precios y a facilitar el suministro para los pacientes, así como «impulsar una industria pública que pueda promover la investigación de manera neutra».
Ciudadanos es otro de los partidos que ha formulado un voto particular: en el texto, al que ha tenido acceso Efe, la formación quiere que el Congreso estudie crear una subcomisión «a la mayor brevedad posible» para examinar las experiencias comparadas de regulación del cannabis con fines recreativos con el objeto de aprobar un marco normativo que legalice este uso.
Por el contrario, el PP vuelve a oponerse al considerar que no existe una base científica y médica «sólida y rigurosa» sobre la utilización terapéutica del cannabis y de sus productos derivados, por lo que es necesario consolidar la evidencia y «disponer de todos los avales de calidad, seguridad y eficiencia requeridos».
Los populares creen que corresponde a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) llevar las riendas sobre este asunto y no al Parlamento y les preocupa que regularizarlo sin evidencia pueda derivar en «la banalización del consumo» y acabe convirtiéndose en un problema de salud pública.
Asimismo, recuerda que ya existen dos medicamentos aprobados -Sativex, para la espasticidad muscular secundaria a la esclerosis múltiple, y Epidiolex, para convulsiones relacionadas con dos tipos poco comunes y severos de epilepsia- y que es a estos usos a los que debe restringirse, además del dolor crónico no oncológico, incluido el neuropático, sobe el que hay más evidencias.
No menciona, por tanto, el dolor oncológico y la endometriosis que introdujo el dictamen final de la subcomisión.
Por su parte, Vox rechaza de plano el dictamen porque cree que la legalización del cannabis o marihuana para su uso medicinal «no tiene sustento científico, es innecesaria y abre la puerta a que el uso «recreativo» de la marihuana inunde la sociedad, con unas consecuencias sociales y sanitarias que auguramos serán desastrosas».
Tras el voto del dictamen y los votos particulares, la Comisión deberá decidir si eleva a pleno el documento final, aunque fuentes parlamentarias consultadas por Efe dan por hecho que esta tarde será el paso final.
A la espera de lo que finalmente se apruebe, Sanidad tendrá seis meses para regular y encontrar un encaje a las recomendaciones que le lance el Congreso, plazo que comenzará hoy mismo.
«En un plazo de 6 meses desde la aprobación de este Informe por la comisión de Sanidad y Consumo del Congreso, la AEMPS realizará los trabajos necesarios para que las citadas recomendaciones tengan encaje en la normativa y sean viables, permitiendo la disponibilidad en el mercado farmacéutico de extractos o preparados estandarizados del cannabis», concluyó la subcomisión.