El incendio forestal declarado este sábado en Añón de Moncayo (Zaragoza) mantiene evacuadas a unas 1.300 personas de ocho poblaciones de la zona y cuenta sobre el terreno con más de 300 efectivos. Actualmente trabajan en un perímetro provisional de más de 50 kilómetros, con miles de hectáreas afectadas de pinar, carrascal y cultivos agrícolas. Todo ello lo convierte en una situación «crítica» por la «compleja meteorología».
El director general de Medio Natural y Gestión Forestal del Gobierno de Aragón, Diego Bayona, ha explicado a los medios que el comportamiento del fuego ha sido «muy virulento» durante la noche. Lo que ha sido «muy complejo» y en la que se ha trabajado especialmente con todos los recursos para defender las poblaciones de Ambel y Añón, evacuadas este sábado. Todo ello hace se hayan vivido «situaciones muy complicadas», así como en el Santuario de la Misericordia de Borja, donde se encuentra el controvertido «Ecce Homo».
os medios se han focalizado en estos puntos, uno de ellos, Añón de Moncayo, donde se inició el fuego sobre las 15:00 horas por causas que se están investigando y preocupa, según Bayona, dado que esta noche se ha reactivado y es una zona cercana al Parque Natural de Moncayo, de gran valor y «disponibilidad de combustible».
En la zona trabajan más de 300 efectivos y se están haciendo esfuerzos para dotar de más al operativo, que dispone de 10 medios aéreos y una treintena de vehículos autobomba, entre los propios del Gobierno de Aragón, del Ministerio para la Transición Ecológica, la Diputación y el Ayuntamiento de Zaragoza, y bomberos de Castilla y León y Navarra.
Los municipios evacuados por este incendio son los de Añón de Moncayo, Alcalá de Moncayo, Vera del Moncayo, El Buste, Bulbuente, Ambel, Trasmoz y Talamantes -este último este domingo-, además del campin de Vera, el Santuario de la Misericordia de Borja y la Urbanización Cumbre del Moncayo de Añón.
Según ha explicado la directora general de Interior y Protección Civil, Carmen Sánchez, todas estas personas, unas 1.300, han sido realojadas en el polideportivo de Borja, Tarazona, Torrellas y Magallón, donde trabaja Cruz Roja y se ha desplazado la brigada logística del ejército en Zaragoza para instalar camas.
El fuego mantiene cortadas cuatro carreteras: la N-122 desde Borja a Tarazona, entre los kilómetros 64 al 86; dos autonómicas y una provincial.
Vientos «muy cambiantes y racheados»
Se han pedido refuerzos y medios aéreos a las comunidades vecinas de Castilla y León y Castilla-La Mancha, y la previsión para este domingo pasa por la evolución del viento pues se prevén rachas de hasta 50 o 60 kilómetros por hora con situaciones «muy cambiantes y racheados en las distintas zonas del incendio», lo que hace prever una situación «complicada» y «estrategias diferentes», ha incidido Bayona.
El director general ha querido tranquilizar a la población afectada porque se adoptarán «las medidas necesarias» para que no haya daños personales y en las labores de extinción trabajan «todos los medios posibles», ha dicho.
El fuego está «muy activo» y fue desde su inicio «muy virulento» pues «en poco más de media hora de su inicio ya hubo que tomar medidas de evacuación» de población, ha recordado, con vientos que llegaron a alcanzar hasta 80 kilómetros por hora y un terreno «seco» que ha posibilitado que haya alcanzado una velocidad «muy grande» y que durante parte de la tarde del sábado no pudieran incorporarse los medios aéreos.