El equipo de Gobierno de Manuela Carmena ha logrado este miércoles sacar adelante, con apoyo del PSOE, el Plan Económico Financiero (PEF) que según el Ministerio de Hacienda no puede aceptarse por incumplir la regla de gasto.
El plan económico del Ayuntamiento de Madrid ha quedado aprobado con la oposición del PP y Ciudadanos en el Pleno ordinario, tras un tenso debate en el que el PP ha pedido el voto a mano alzada con la intención de evidenciar una división en el seno del grupo municipal del PSOE que finalmente no se ha hecho visible.
El grupo socialista, que se abstuvo en la comisión de junio último, cuando el equipo de Gobierno llevó a la comisión a este plan, ha votado hoy a favor tras aprobarse una enmienda en la que solicita al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas una revisión de la regla de gasto para no tener que limitar las inversiones a los ingresos del año anterior, ya que esa regla puede generar un superávit «muy importante» en el presupuesto.
El Ministerio asegura que el plan prevé un incremento de su techo de gasto de 2014 a 2017 cercano a los 700 millones de euros «con un decremento considerable de su capacidad de financiación».
El documento condiciona además la aprobación de las cuentas para 2017, en el que consta que el Ayuntamiento aspira a gestionar el próximo año 4.646 millones de euros, un 9,36 por ciento más de lo consignado para 2016.
El plan presentado por el Ayuntamiento incluye un incremento del gasto y de las inversiones, pero el delegado de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato, ha sostenido que con él busca precisamente anticiparse y «evitar» incumplir la ley, al incrementar el gasto habiéndolo comunicado previamente al Ministerio.
«Resulta que estamos haciendo algo ilegal, tan ilegal como lo que hacen el señor Rajoy, de Guindos y Montoro. He leído en los medios que han ido a la Comisión Europea para ver si no nos multaba por incumplir déficit», ha ironizado Carlos Sánchez Mato.
Y ha añadido: «Incumplir la regla de gasto para devolver la paga extra a los funcionarios es una cosa que hicimos gustosos».
En julio, el portavoz del PSOE Julio Ramsés Pérez-Boga, ahora destituido, defendió que el Ayuntamiento debía «tener cuidado a la hora de incumplir las normas».
Hoy, el PSOE ha presentado una enmienda aprobada junto a Ahora Madrid con la que solicita al Ministerio hacer otra interpretación de la regla de gasto dentro de la legalidad, de tal forma que el Ayuntamiento de Madrid pueda «garantizar la continuidad de los servicios públicos» y «pagar de manera solvente y adecuada su deuda con los gastos».
«Madrid tiene superávit y la Administración general no, Madrid sigue reduciendo su deuda y la Administración general la sigue aumentando. Madrid tiene buena salud (…). Es verdaderamente absurdo que un Ayuntamiento que en 2015 tuvo un remanente de tesorería tenga que realizar ajustes de en torno a los 500 millones de euros», ha explicado al Pleno la nueva portavoz del PSOE en materia de Hacienda, Carlota Merchán.
Tanto el PP como Ciudadanos han criticado con dureza al PSOE y a Ahora Madrid por su irresponsabilidad de llevar a la ciudad a un enfrentamiento con el Ministerio de Hacienda que, en opinión del portavoz adjunto del PP Íñigo Henríquez de Luna, podría terminar con el Consistorio intervenido e incluso el delegado inhabilitado.
El concejal del PP ha incidido además en la contradicción del PSOE, que «aprobó la reforma de la Constitución Española, aprobó la ley y ahora pretende saltársela», y ha pedido a Carlos Sánchez Mato que antes de tomar una decisión de estas características «debería advertir de cuáles son las consecuencias políticas».
En la misma línea, el concejal de Ciudadanos Miguel Ángel Redondo ha reprochado a Ahora Madrid que presente este documento «para tener una confrontación con el Ministerio de Hacienda» y servir de ejemplo a otros ayuntamientos, pues ya sabe que el plan «incumple la norma, supone votar algo que es ilegal y además el Ministerio lo rechazará».
El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas informó el pasado viernes de que, en virtud de la normativa de Estabilidad Presupuestaria, es de su competencia la aprobación «definitiva» del PEF del Ayuntamiento de Madrid «por ejercer su tutela financiera» y aseguró que su incumplimiento resulta «incompatible» con los objetivos de estabilidad asignados a España.
Al respecto, la portavoz municipal, Rita Maestre, mostró su «absoluta tranquilidad», pues, según comentó, «un Ministerio de Hacienda en Funciones sabe que no puede enfrentarse a una mayoría de Pleno».
EFE