El alcalde de Boadilla, Antonio González Terol, asistió al entrenamiento del Nuevo Boadilla en el que se realizó el primer ensayo de la prueba a cuarenta niños de dos de los equipos del club y pudo comprobar cómo el equipo médico sacaba sus conclusiones en base a los datos que obtuvieron de cada uno de los jugadores.
El reconocimiento se realiza en el propio campo y se compone de cinco partes: un cuestionario sobre antecedentes familiares, dado que la mayoría de las causas de la muerte súbita del deportista joven son genéticas; un cuestionario sobre síntomas que hagan sospechar de enfermedad cardiaca; una exploración física cardiovascular para buscar alteraciones que orienten hacia una enfermedad valvular o rasgos de enfermedad genética; un electrocardiograma de 12 derivaciones con el que se distinguen los cambios atribuibles a la adaptación cardiovascular al ejercicio de aquellos que sugieren enfermedades genéticas precursoras de arritmias letales y la monitorización electrocardiográfica de esfuerzo en un entrenamiento de alta intensidad intentando llegar a la frecuencia máxima para valorar la respuesta del corazón al ejercicio y descartar la presencia de arritmias durante el mismo.
Tras la valoración de cada una de las partes del reconocimiento, el equipo médico elabora un informe confidencial que traslada a los padres para que conozcan el estado de salud de su hijo en relación a la práctica del deporte.