Se han confirmado los peores presagios de los más de 30 auxiliares de información de los centros municipales del distrito de Puente de Vallecas. Todos han recibido a primera hora de la mañana de hoy un burofax con la carta de despido. Lo peor de todo es que los empleados no percibirán finiquito alguno porque la empresa Prenan, subcontrata del Grupo Ortiz que era la adjudicataria del servicio municipal, se ha declarado en quiebra.
@kolontai1959 @PacoPerezRamos nos acaba de llegar el burofax de despido y empresa en quiebra no nos paga el finiquito.
— j (@adrv1981) 8 de marzo de 2017
Los despidos se producen sólo un día después de que tuviera lugar una manifestación en las puertas de la Junta Municipal del distrito que preside Francisco Pérez. A la concentración acudieron todos los empleados que hasta el día de ayer 'disfrutaban' de unas vacaciones otorgadas por la empresa mientras decidían que hacían con ellos. Además, a la misma también asistieron concejales de la oposición, miembros de Comisiones obreras y jubilados que regentan de manera habitual los centros de mayores de los que han sido despedidos estos auxiliares de información.
Tras confirmarse la noticia estos trabajadores quedan en un limbo administrativo y laboral de difícil solución. Al no contemplar su convenio colectivo la subrogación obligatoria la empresa entrante no tiene el deber ni el compromiso de contratar a los trabajadores despidos. Esto ocurre porque Francisco Fernández, concejal presidente del distrito de Puente de Vallecas, considera que el convenio colectivo que le corresponde a los auxiliares de información es el de Oficinas y Despachos. Sin embargo, los propios afectados e Isabel Rodríguez, Secretaría de Política Local y Ciudad de Madrid en CCOO, defienden que sus funciones pueden ser encuadradas perfectamente en el convenio de Seguridad que sí contempla la subrogación obligatoria.
«Es un fallo de voluntad política. No es que no hayan podido, es que no han querido», afirmaban algunos de los trabajadores presentes en la manifestación del pasado 7 de marzo. «¿Este es el Ayuntamiento del Cambio», se preguntaban otros empleados.
De todos modos, aunque estos auxiliares de información hubieran conseguido el convenio colectivo de Seguridad habrían encontrado otro escollo a la hora de ser reabsorbidos por la empresa entrante porque el adjudicatario provisional del servicio es un centro especial de empleo. En este sentido, la Ley marca que al tratarse de un centro especial de empleo la plantilla debe de estar formada por al menos un 70% de personas con una discapacidad reconocida del 33% o superior.
A pesar de no tener entre sus condiciones la subrogación obligatoria, Pérez se ha comprometido a que el 30% de la plantilla restante sea seleccionada de los auxiliares informativos despedidos. Pero esta medida tampoco ha contentado a los sindicatos ni a los propios afectados que han afirmado que la propuesta más que una solución parece «un casting». «¿Qué método van a utilizar para para elegir a los trabajadores?; ¿Qué va a ser un casting?«, se preguntaba la representante sindical, Rodríguez.
De momento, la realidad es que los trabajadores han sido despedidos de su empresa y que la única alternativa que les ha ofrecido Pérez, concejal presidente de Vallecas, es un 'casting' para formar parte del centro especial de empleo que se hará cargo del Servicio o pasar a formar parte de un proyecto de la Junta de distrito que garantiza un contrato temporal de nueve meses de duración.
Carlos Lospitao