El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado que pretende ampliar el horario del SER (Servicio de Estacionamiento Regulado) de Madrid y que también estudiará extender el radio de aplicación de este servicio a las zonas periféricas de la capital. Los grandes afectados de esta medida son los empresarios de las pequeñas y medianas empresas de la capital. De hecho, según estudios realizados por la COCEM (Confederación del Comercio Especializado de Madrid) la aplicación de este nuevo horario podría suponer la destrucción de entre el 20% y el 30% de este sector. «Siempre atacan a los mismos y estamos cansados», afirma Luis Pacheco, presidente de la COCEM.
En un principio, el Ayuntamiento de Madrid pretende alargar el horario de aparcamiento en las zonas azul y verde de la capital hasta las 24.00 horas de la noche. Además, la aplicación de esta medida se realizará en zonas donde conductores no empadronados utilizan las plazas de aparcamiento para residentes de forma compulsiva a diario, más allá de las 21.00 horas, los fines de semana y festivos, según Inés Sabanés, delegada de Medio Ambiente y Movilidad del consistorio madrileño. Esta decisión se enmarca dentro del Plan A de Calidad del Aire y Cambio Climático elaborado por el Gobierno de Manuela Carmena, que tiene por objetivo reducir el 50% de las emisiones causadas por el tráfico urbano en el horizonte 2030.
Pero esta medida no es del gusto de todos los madrileños. De hecho, hay un sector, el del pequeño y mediano comercio, que está muy enfadado con la forma de actuar del equipo de Ahora Madrid. «La ampliación del perímetro y del horario del servicio del estacionamiento regulado, el SER, va en detrimento de la pequeña y la mediana empresa, del comercio de proximidad. Es la medida de siempre y es un palo de ciego más», explica Pacheco.
El enfado de los pequeños comerciantes no sólo se deben a la propia aplicación de la medida, sino a la falta de consenso que ha existido. «No nos han consultado nada», se queja Pacheco. En este sentido, el presidente de la confederación asegura que ellos tiene un plan mucho más efectivo para acabar con la polución de la capital que pasa por prohibir la apertura de los centros comerciales y los grandes almacenes los domingos y los festivos.
«Cada domingo, cerca de 100.000 vehículos circulan por Madrid para realizar compras, no para ir al campo, sino para visitar los grandes almacenes de la capital que cuentan con aparcamientos de entre 3.000 y 5.000 plazas. Este movimiento consume nueve millones de litros de combustible que van a para a la nube tóxica que invade Madrid«, afirma Pacheco. «Luego llega el lunes y el Ayuntamiento limita la velocidad de la M-30, intercepta a los coches con matrícula par…» prosigue el presidente el COCEM.
En este sentido, Pacheco afirma que la aplicación de esta medida podría suponer la destrucción del entre 20% y el 30% del pequeño y mediano comercio, según informes internos que maneja la confederación. «Las personas dejarían de utilizar el vehículo para ir a comprar a nuestros comercios y se dirigirían a los aparcamientos de los grandes almacenes. Además, las personas que tengan una furgoneta de reparto tendrían que pagarse una plaza de aparcamiento privada… Es el fin de nuestro sector», espeta Pacheco.
Un nuevo modelo de ciudad
Las críticas del gremio con respecto a esta medida no sólo se centran en la pérdida de empleo, también se dirigen en un cambio del modelo de la ciudad. «Al final van a conseguir que se formen barrios sin vida, sin tránsito de personas… El ocio, las compras, el pasear… ¡Todo! se hará en las grandes superficies y las calles pasarán a ser grandes polígonos industriales», afirma Pacheco.
De todos modos, el Ayuntamiento no ha confirmado en las zonas que va a aplicar esta ampliación del horario de la zona SER, aunque según las palabras de Sabanés las zonas más afectadas serán los espacios gastronómicas y de ocio nocturno como la calle Ponzano, en Chamberí, o clásicos de gran afluencia de público como el Rastro de los domingos, colindante con el distrito de Arganzuela. «Esta medida nos va a afectar a todos y los empresarios con bares y discotecas creo que los puede destruir», explica Pacheco.
Aunque se muestran enfadados, el presidente de la confederación afirma que tienen «voluntad» para arreglar la situación generado. Por este motivo, ya han mandado un escrito a Manuela Carmena, alcaldesa de la ciudad de Madrid, en el que solicitan una reunión urgente para tratar la problemática. Por el momento, nadie del consistorio les ha contestado, pero esperan una respuesta «en breves». Por último, llama la atención que concejales como Mauricio Valiente, que en su día lucharon porque la zona SER no llegará a sus barrios ahora defienda la ampliación de los horarios y la extensión a las zonas de la periferia de la capital.
Carlos Lospitao