El ministro de Justicia, Rafael Catalá, convocará durante la primera quincena de noviembre una mesa sindical para discutir la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial antes de llevarla al Consejo de Ministros. El texto abandonará las principales propuestas de Alberto Ruiz-Gallardón e implementará «pequeñas modificaciones» en el modelo actual.
Así se lo ha trasladado el titular de Justicia a los representantes de los sindicatos CCOO y UGT durante la primera reunión mantenida para escuchar sus reivindicaciones y manifestarles la intención de llevar a cabo medidas de «carácter organizativo» para conseguir mejoras en la Administración de Justicia.
El ministro ha garantizado el mantenimiento de los juzgados de paz y ha defendido la gestión del Registro Civil de manos de los registradores mercantiles. La idea inicial es que haya una oficina en las capitales del Registro Civil mientras, en el resto del territorio, los ciudadanos puedan acercarse a sus juzgados para tramitar cuestiones del Registro.
Los sindicatos han manifestado su negativa a esta cesión y esperan ser convocados en «dos o tres semanas» a participar en una mesa de negociación para hablar sobre ideas concretas del nuevo proyecto de ley, según han informado a Europa Press fuentes sindicales.
El ministro mantuvo este miércoles un encuentro con CSIF a quien garantizó que se mantendrán los empleos de los funcionarios y no habrá movilidad forzosa fuera del municipio, según informó la central sindical.