El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, mostró este lunes su satisfacción por el retorno a su país del empresario suizo Max Göldi, retenido desde hace casi dos años en Libia, y destacó que su vuelta a casa ha resultado una «labor muy difícil». A su llegada a un Consejo de Exteriores de la Unión Europea (UE) en Luxemburgo, Moratinos agradeció a las autoridades libias su participación para «resolver definitivamente esa cuestión, así como el trabajo de su homóloga suiza, Micheline Calmy-Rey.
También valoró los esfuerzos que realizan «desde hace muchos meses» la presidencia española de la UE y el Gobierno español, «trabajando de forma discreta, intensa, eficaz». Moratinos y Calmy-Rey negociaron ayer con las autoridades libias la salida de Göldi del país. Los dos ministros lo acompañaron hacia Zurich en un avión de la fuerza aérea española, después de que Libia y Suiza acordasen un «plan de acción» para poner fin a la crisis diplomática entre ambos.
«Al final ayer tuve la gran satisfacción de acompañar a la ministra de Suiza, estar en Libia y devolver al ciudadano Göldi a su tierra, a su nación, comentó el ministro español. Moratinos destacó que el empresario suizo «estaba muy satisfecho, la familia también, y señaló que su liberación «es una gran noticia para el señor Göldi, pero también para Suiza y para todos aquellos que hemos estado trabajando para encontrar una solución, concluyó.
Suiza y Libia están enfrentadas desde la detención de Hanibal Gadafi, hijo del líder libio, Muamar al Gadafi, en Ginebra en julio de 2008, acusado de maltratar a dos empleados domésticos. A raíz de ese hecho, Libia canceló su suministro de petróleo a Suiza, retiró grandes cantidades de fondos de los bancos helvéticos y retuvo en Libia a los empresarios suizos Max Göldi y Rachid Hamdani.
Hamdani fue absuelto y pudo regresar a Suiza el pasado febrero pero Göldi fue condenado a cuatro meses de prisión por estancia ilegal en el país y se le encarceló en una prisión de Trípoli, de donde salió el pasado jueves.