Los dominios ‘.com’ o ‘.es’ ceden sus caracteres al ‘.xxx’. Después de diez años desde que algunas compañías de dominios pidieran a gritos poder comercializar el ‘.xxx’ para las páginas de contenidos pornográficos en la red, por fin la Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números (ICANN) acepta aprobar la creación del dominio para las webs con contenidos sexuales bastante explícitos.
Ya iba siendo hora después de ‘archi-conocer’ que la palabra ‘sexo’ es una de las más consultadas en todo el mundo en la red. Hasta para gran parte de los internautas si el sexo no resulta “lo único” al menos sí resulta “de lo más”, de lo más importante, claro. Y es que el 25% de las consultas que se hacen por internet están destinadas a buscar contenidos sexuales.
El proyecto podría causar controversia no sólo en los sectores más conservadores, también podría provocar una batalla legal entre el ICANN, el organismo que ha aprobado la extensión, y la compañía ICM Registry que lleva años detrás de la extensión ‘.xxx’ para vender dominios.
Sería un gran negocio para los propietarios del dominio ya que la industria pornográfica tiene más de 370 millones de páginas en la red.