La tormenta tropical Alex, la primera de la temporada de huracanes en el Atlántico, tocó tierra en Belice con vientos máximos sostenidos de 100 kilómetros por hora, informaron hoy meteorólogos estadounidenses.
El centro de la tormenta se desplazaba sobre territorio beliceño arrastrando lluvias intensas y se pronostica que cruzará la península de Yucatán, en México, este domingo, según el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos.
Está vigente un aviso de tormenta tropical (paso del sistema en 36 horas) para Belice y la costa este de la península Yucatán desde Chetumal hasta Cancún.
Honduras ha suspendido el aviso de tormenta tropical para las islas de Roatán, Guanaja y Utilia y la vigilancia (paso en 48 horas) emitida para Tela hasta Limón.
Debilitamiento de la tormenta
Se vaticina que la tormenta se debilitará este domingo mientras se mueve sobre Yucatán, pero cobraría intensidad el lunes cuando emerja en las cálidas aguas del sur del Golfo de México que le sirven de «combustible».
El centro de la tormenta se hallaba localizado a las 03.00 GMT a unos 30 kilómetros al noroeste de Ciudad de Belice y 330 kilómetros al sureste de Campeche (México).
Se desplaza hacia el oeste-noroeste a 19 kilómetros por hora.
Derrame de crudo
Los meteorólogos dijeron que con la actual ruta de Alex aún no se sabe si podría interrumpir las labores que realiza la empresa BP para frenar el derrame de crudo en el Golfo de México y afectar la producción de las plataformas de petróleo en esa zona.
Los pronósticos a cinco días del CNH vaticinan que Alex se transformará en un huracán el próximo martes en la tarde y tocaría tierra por segunda vez en México, el miércoles en la noche.
La tormenta arrojará lluvias torrenciales sobre Yucatán, el este de Guatemala, Honduras y Belice hasta el próximo domingo que causarían deslizamientos de tierra e inundaciones repentinas.
La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de EE.UU. (NOAA) pronosticó para la temporada de huracanes en el Atlántico que comenzó el 1 de junio y finaliza el 30 de noviembre, la formación de 14 a 23 tormentas y entre 8 a 14 huracanes que descargarían su furia en EE.UU., el Caribe, Centroamérica y el Golfo de México.
Los meteorólogos han vaticinado una temporada «extremadamente activa» porque de esos huracanes entre 3 y 7 podrían ser de gran intensidad con vientos superiores a 177 kilómetros por hora.