Al menos 70 personas han muerto este domingo a consecuencia de dos explosiones registradas en otros tantos bares de la capital de Uganda, Kampala, que se encontraban llenos de gente que estaba viendo la final del Mundial de fútbol disputado entre España y Países Bajos, informan fuentes policiales.
Según ha informado el inspector general de la Policía, Kale Kayihura, varias de las víctimas murieron a consecuencia de una explosión en el restaurante Ethiopian Village, que dejó un número indeterminado de heridos. Las otras víctimas que hasta ahora han sido confirmados se encuentran se produjeron en un club de rugby de Kampala.
Los heridos han sido trasladados a hospitales cercanos, según fuentes de la agencia Reuters que cita a testigos presenciales. Sin embargo, el número de muertos y heridos confirmados podrían incrementarse en las próximas horas, ya que la Policía ha alertado de que los daños provocados por las dos deflagraciones son cuantiosos.
Según fuente policiales, las primeras sospechas indican que el atentado podría haber estado dirigido contra extranjeros, ya que durante los últimos tiempos habían recibido advertencias en este sentido por parte de la guerrilla somalí Al Shabaab, ligada a la red Al Qaeda, y al Ejército de Resistencia del Señor, una guerrilla enfrentada al Ejecutivo de Kampala que opera en el norte de Uganda desde hace dos décadas.