El embajador de Colombia ante la OEA, Luis Alfonso este juevesos, calificó este jueves de errónea» la decisión del Gobierno venezolano de romper las relaciones con la administración colombiana y lamentó que no rompa los lazos con las «bandas criminales» como las FARC. Por su parte, la OEA pidió a los Gobiernos de ambos países que «calmen los espíritus» y busquen «un camino» para superar su crisis y la ruptura de sus relaciones.
«Es errónea la decisión de Venezuela. Con quien debe romper la relación es con las bandas criminales y no con el Gobierno legítimo de Colombia», dijo este juevesos, después de que el presidente venezolano, Hugo Chávez, anunciara la ruptura de los lazos diplomáticos con Colombia.
OEA
El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, lanzó este jueves un llamamiento a los Gobiernos de Venezuela y Colombia para que «calmen los espíritus» y busquen «un camino» para superar su crisis y la ruptura de sus relaciones cuanto antes.
«Hago un llamado a calmar los espíritus y buscar un camino» para resolver sus diferencias, dijo el titular de la Organización de Estados Americanos (OEA), al tiempo que recordó a Venezuela y Colombia que «tienen objetivos comunes» y que ambos, como la región en su conjunto, han superado otras crisis en el pasado.
«Fuimos capaces de superar hace algunos años crisis graves. Espero que ahora también pero los pasos los tienen que dar Venezuela y Colombia, y espero que puedan entenderse en los próximos meses», señaló Insulza.
El secretario general reaccionaba así, en una sesión extraordinaria del Consejo de la OEA, al anuncio del presidente venezolano, Hugo Chávez, de romper las relaciones con Colombia a raíz de la denuncia de ese Gobierno sobre la presencia de guerrillas en territorio del país vecino.
Insulza ofreció asimismo de nuevo sus «buenos oficios» y la «mediación» de la OEA para que ambos países solucionen su más reciente crisis.
«Si necesitan la cooperación de la OEA siempre estamos dispuestos», agregó el diplomático chileno.
Eso sí, recordó, ambas naciones tienen que dar este paso de «común acuerdo», pues una posible mediación «nunca debe ser impuesta a la soberanía de países».