Un total de 787 nuevos incendios forestales, de diversa magnitud, se registraron en Rusia en las últimas veinticuatro horas, de los cuales 387 fueron sofocados, informó este sábado el ministerio para Situaciones de Emergencia.
En todo el país actualmente tienen lugar 61 incendios de gran magnitud, que afectan a una superficie de más de 65.000 hectáreas, dijo un portavoz de Emergencia a la agencia oficial Itar-Tass. Una de las regiones más afectadas por el fuego es Nizhni Nóvgorod, a unos 400 kilómetros de Moscú, donde quedaron arrasadas aldeas completas y murieron doce de las treinta víctimas mortales que se han cobrado los incendios.
«La falta de viento ha ayudado hoy a contener el fuego», declaró al canal de noticias «Vesti» el gobernador de Nizhni Novgorod, Valeri Shántsev, quien añadió que la situación ha mejorado ligeramente en las últimas horas.
Desde el comienzo del verano, marcado este año por la mayor ola de calor en Rusia en más de un siglo de observaciones meteorológicas, en el país se han registrado más de 23.000 focos de incendios naturales, un 17 por ciento más que en 2009, en una superficie de 404.000 hectáreas.
La víspera, el presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, autorizó el uso de los efectivos de las Fuerzas Armadas en la lucha contra los incendios forestales. Los soldados se sumaron a los más de 200.000 efectivos del ministerio para Situaciones de Emergencia que participan en las labores contraincendios.
La gravedad de los incendios forestales ha obligado a las autoridades a declarar el estado de emergencia en 27 de las 83 entidades que conforman la Federación Rusa.