El índice de la violencia en Iraq volvió a subir el pasado mes de julio, en el que murieron 535 personas, muy por encima de los 284 fallecidos en junio pasado, informaron este domingo fuentes del Ministerio del Interior.
Las fuentes explicaron a Efe que, además, otras 1.043 personas resultaron heridas en julio en las distintas provincias del país, sin incluir la región autónoma del Kurdistán iraquí.
Entre los fallecidos se encuentran 89 policías y soldados iraquíes, de los cuales 34 murieron en Bagdad. Del total de muertos, 176 perdieron la vida en ataques en la capital, agregaron las fuentes.
2.400 muertos en seis meses
Las víctimas se han producido debido a ataques con cuatro coches bomba, 24 asesinatos con pistolas con silenciadores, dos atentados con cinturones de explosivos, 136 artefactos explosivos y 113 proyectiles de mortero.
El pasado mes de junio había marcado una disminución notable de la violencia desde las elecciones legislativas de marzo. Según los datos de la ONG Observador de Libertades Constitucionales incluidos en un estudio sobre los últimos seis meses, 2.405 personas han muerto en este periodo, otras 7.163 han resultado heridas y 63 han sido secuestradas.
El aumento de víctimas en julio se produce en medio de la incertidumbre política por el retraso en la formación de un nuevo Gobierno a consecuencia de las discrepancias entre los distintos grupos políticos.