Los servicios de rescate encontraron la caja negra del avión siniestrado en la noche de este martes, mientras los 42 cadáveres comenzaron a ser trasladados al tanatorio para ser identificados por sus familiares, informó este miércoles la prensa oficial.
En un primer momento la cifra de fallecidos se sitúo en 43, pero el Gobierno de Yichun anunció hoy que son 42 el número de muertos.
El avión, un E-190 fabricado por la brasileña Embraer y fletado por la compañía china Henan Airlines, se estrelló cerca de la pista de aterrizaje del aeropuerto Lindu de la localidad de Yichun, en la provincia nororiental de Heilongjiang, y quedó envuelto en llamas, con 96 personas a bordo.
De acuerdo con el Gobierno, las fechas de nacimiento de los carnés de identidad muestran que la edad de los fallecidos se encuentra entre los 12 y 55 años.
La Administración de Aviación Civil de China declaró que de las 96 personas que viajaban en el avión, cinco eran niños y otros cinco pertenecían a la tripulación.
Fuentes oficiales confirmaron también que un grupo de funcionarios del Ministerio de Recursos Humanos y Seguridad Social viajaban en el avión y la mayoría de ellos han sobrevivido al siniestro.
Por otro lado, la prensa indicó que el capitán del avión sobrevivió al accidente, y en estos momentos está en el hospital pero no se encuentran en condiciones de contar los sucedido.
El aparato había despegado poco antes de las 21.00 horas locales (13.00 GMT) de la capital provincial, Harbin, para cubrir un corto vuelo de 360 kilómetros con destino a Yichun, al norte de la urbe harbinesa y situada a unos 150 kilómetros de la frontera con Rusia.
Se desconocen por ahora las causas del accidente, aunque se sospecha que la densa niebla que cubría la zona dificultó el aterrizaje del avión, que al parecer se salió de la pista cuando intentaba tomar tierra, rompió su fuselaje y se incendió.
La web de la revista económica china Caijing apunta que el aeropuerto de Yichun no estaba preparado para operar por la noche.
Por el momento, el fabricante de aviones brasileño Embraer envió inmediatamente a China un equipo de técnicos para investigar el accidente.
El anterior siniestro aéreo de gran magnitud en la aviación comercial china se produjo en noviembre de 2004, cuando un Bombardier CRJ-200LR se estrelló cerca de Baotou (norte de China), causando la muerte de 53 personas a bordo y otras dos en tierra.