El accidente aéreo ocurrido este lunes en Ciudad Guayana, en el sureste de Venezuela, cuando un avión de la compañía estatal Conviasa con 51 personas a abordo se estrelló a escasos 10 kilómetros del aeropuerto de destino, dejó un saldo final de 15 muertos y 36 heridos.
Así lo informó en rueda de prensa el ministro venezolano de Transportes y Comunicaciones, Francisco Garcés, luego de que en un primer momento se informó que del total de 51 personas a bordo de la aeronave procedente de isla Margarita 14 habían muerto, 33 estaban heridas y 4 desaparecidas.
Garcés y el gobernador del estado Bolívar, Francisco Rangel Gómez, subrayaron en la misma comparecencia ante los periodistas que los 36 sobrevivientes son tales «gracias a los héroes de Sidor».
El accidente se produjo a las 09.50 hora local (13.20 GMT), cuando el avión se precipitó al suelo cerca de uno de los portones de entrada de la Siderúrgica del Orinoco (Sidor), en Ciudad Guayana (Puerto Ordaz), cuyos trabajadores actuaron de inmediato y extinguieron las llamas del aparato y sacaron a las víctimas.
Ambos funcionarios detallaron en Ciudad Guayana, a unos 730 kilómetros al sureste de Caracas, que de los cuatro tripulantes del aparato solo sobrevivió una de las azafatas y que aún resta por obtener el reconocimiento oficial de seis de los 15 cuerpos.
Asimismo, ambos destacaron que no se produjeron víctimas en tierra porque el avión cayó sobre un patio de material de desechos de Sidor, uno de los principales centros industriales de Venezuela.
Se desconocen, por el momento, las causas del accidente pero, según informaciones extraoficiales, el piloto de la aeronave perdió el control y trató de realizar un aterrizaje de emergencia, cuando verificó que no podría hacerlo en el Aeropuerto Internacional «Manuel Carlos Piar» de Ciudad Guayana.
Óscar Crespo, trabajador de Sidor y uno de los primeros en acudir en ayuda de los heridos, dijo a los periodistas que sintió «el fuerte impacto del avión en el patio y cuando salimos vimos el avión en llamas».
El ministro de Transportes informó, por su parte, que se encontraba en el lugar del accidente una comisión técnica para comenzar las averiguaciones oficiales con el objetivo de esclarecer los motivos del siniestro.
Garcés agregó que gracias a «la intervención oportuna de las autoridades pudieron rescatar una gran cantidad de personas» y destacó el hecho de que «un gran número de personas ha sobrevivido».
Asimismo, el vicepresidente de la República, Elías Jaua, destacó en una comparecencia ante los periodistas en Caracas que además de los trabajadores de Sidor actuaron con celeridad «todos los equipos de rescate y médicos» de la zona para atender a los sobrevivientes.
El avión, un ATR-42 de fabricación franco-italiana, que salió de Porlamar (isla de Margarita) y tenía por destino Ciudad Guayana, pertenecía a la compañía estatal Conviasa.
Se trata del accidente aéreo más grave en Venezuela en los últimos años, tras el sucedido en febrero de 2008 cuando un avión que cubría la ruta Mérida-Caracas se estrelló contra una montaña de los Andes y fallecieron las 46 personas abordo.
En enero de 2008, un avión con 14 personas, entre ellos 8 turistas italianos y un suizo, cayó al mar Caribe cuando volaba desde Caracas al archipiélago de Los Roques, uno de los principales destinos turísticos de Venezuela, sin que se hallaran restos.
Tres años antes, un avión de la compañía colombiana West Caribbean Airways que cumplía la ruta entre el aeropuerto panameño de Tocumén y el de Lamentin, en Martinica, se precipitó al suelo con 152 turistas franceses y 8 tripulantes colombianos, en el estado venezolano de Zulia, fronterizo con Colombia. No hubo sobrevivientes.