El Gobierno español insistió este martes en que la ONU debe liderar una salida para rebajar la tensión por el desalojo del campamento saharaui en El Aaiún a cargo de Marruecos, aunque aclaró que no ha pedido convocar una reunión del Consejo de Seguridad sobre este asunto, al no tener capacidad para ello.
Así lo afirmó desde Bolivia la ministra española de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, quien precisó que la competencia para convocar una reunión del Consejo de Seguridad es del Reino Unido, al ser el país que ejerce la presidencia de turno de este órgano.
Jiménez hizo esta aclaración después de que en la rueda de prensa previa que ofreció en La Paz con su colega boliviano, David Choquehuanca, se pudiese interpretar que había solicitado la convocatoria del Consejo de Seguridad, del que España no es en la actualidad miembro no permanente.
Labor de la ONU
En declaraciones a los periodistas, reiteró que la comunidad internacional debe ser la encargada de abordar la crisis provocada por el desmantelamiento por la fuerza del campamento de protesta saharaui.
La responsable de la diplomacia española recordó que ya estaba previsto que el enviado especial de la ONU para el Sáhara Occidental, Christoper Ross, compareciese ante el Consejo de Seguridad el próximo día 23 para informar de los avances del diálogo entre Marruecos y el Frente Polisario.
A pesar de lo ocurrido en el campamento de El Aaiún, donde podrían haber muerto varias personas, Marruecos y el Polisario aceptaron reanudar este martes las conversaciones informales en Nueva York bajo los auspicios de la ONU.
A juicio de Jiménez, se trata de un gesto «positivo» que debe favorecer un clima de entendimiento entre marroquíes y saharauis para poner fin a un conflicto que se remonta a 1975, cuando España se retiró de la que era su colonia.