El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, expresó este sábado su impresión de que el líder libio Muamar el Gadafi ya no controla la situación en su país y manifestó su inquietud ante un futuro «lleno de incógnitas graves» con posibles regímenes de fundamentalismo islámico próximos a Italia.
Durante un congreso en Roma del Partido Republicano Italiano (PRI), el jefe del Ejecutivo italiano apeló este sábado a que tanto Europa como Occidente no se mantengan como «simples espectadores» de lo que sucede en el norte de África.
«Parece que efectivamente Gadafi no controla ya la situación: muchos hombres importantes han dejado su equipo de Gobierno», afirmó Berlusconi, en un discurso retransmitido en directo por televisión.
«Para nosotros el futuro está lleno de incógnitas graves. Esos pueblos podrían acercarse a la democracia, pero podríamos encontrarnos también con estados fundamentalistas islámicos no lejos de las costas italianas», añadió.
El primer ministro dijo además que «Europa y Occidente no pueden quedarse como simples espectadores» ante lo que sucede en el Norte de África y que, sobre todo, no puede hacerlo Italia, ya sea por motivos de seguridad o por los intereses económicos de las empresas italianas en países como Libia.
«Existe el riesgo de una emergencia humana, con decenas de miles de personas que necesiten auxilio», apuntó el mandatario.
Berlusconi pidió además a la clase política italiana unidad y que se dejen las «polémicas mediocres» ante las «tragedias de la historia» como la de Libia, después de que ayer el líder del opositor partido Italia de los Valores (IDV), Antonio di Pietro, comparara a su Gobierno con el de Gadafi.
«Está cambiando el escenario geopolítico e Italia participa de ello. Nadie ha podido prever lo que ha ocurrido en Libia y lo que ocurrió algunas semanas antes en Túnez y Egipto. Y nadie podrá prever lo que sucederá», incidió.
«Si todos estamos de acuerdo podemos poner fin al baño de sangre y apoyar al pueblo libio», añadió.