Cerca de 140 inmigrantes procedentes del norte de África alcanzaron en las últimas horas la isla italiana de Lampedusa, donde se calcula que desde el viernes han llegado cerca de 400 personas, la mayoría de ellos tunecinos.
Durante la noche unos 120 inmigrantes que viajaban a bordo de una embarcación que se encontraba en condiciones precarias fueron socorridos por la Guardia Costera y la Guardia de Finanzas a pocas millas de la costa, informaron hoy los medios de comunicación italianos.
Otra veintena de personas fueron interceptadas por los Carabineros (policía militarizada) cuando ya habían logrado llegar a tierra por sus propios medios.
Asimismo, la pasada noche una barcaza que partió de Libia con unas 350 personas a bordo sufrió una avería en aguas del Mediterráneo y lanzó un mensaje de socorro a través de un teléfono por satélite, informa el diario «La Repubblica».
El rotativo señala que los indocumentados refirieron en su llamada de auxilio que una nave con bandera canadiense, probablemente parte del operativo de la OTAN desplegado en el Mediterráneo, se había aproximado a ellos y les había ofrecido remolcarles hasta Túnez, pero que se había alejado ante la negativa de los inmigrantes.
En Lampedusa se vivieron momentos de tensión durante la jornada del viernes por las protestas de algunos de los inmigrantes que esperan en la isla a ser trasladados a otros puntos de Italia y a causa de los retrasos registrados en la distribución de la comida.
En los últimos días la población de la isla llegó a alcanzar las 11.000 personas, entre inmigrantes, residentes y fuerzas del orden, lo que llevó el pasado jueves a las autoridades locales a hacer un llamamiento al Ejecutivo para que facilite agua potable a la isla.
Con el objetivo de aliviar la situación de emergencia que atraviesa la isla, el Ministerio del Interior anunció ayer que se que se utilizarán embarcaciones para pasajeros con el fin de ayudar en el traslado de los inmigrantes a otros centros de Italia.
Unos medios que se sumarán a los vuelos entre Lampedusa y la península establecidos por el Gobierno para permitir la evacuación de inmigrantes y a las tareas de la nave militar «San Marco», que en las últimas horas ha llevado a cabo su segunda operación con el traslado de unos 500 inmigrantes hacia Taranto, en el sur de Italia.