La Policía Nacional trasladó anoche a España desde Rusia a Tariel Oniani, considerado uno de los máximos jefes de la mafia ruso-georgiana en España, que logró huir de la «operación Avispa» en 2005 y que hoy comparecerá ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu.
Las autoridades rusas, ha informado la Policía, han autorizado su entrega temporal a España para que pueda ser juzgado en la Audiencia Nacional, que le reclama desde 2005 por delitos de blanqueo de capitales y asociación ilícita.
Oniani, ciudadano georgiano de 52 años, comparecerá ante el juez Fernando Andreu para regularizar su situación tras su traslado a España.
Se trata de la primera vez, según han informado fuentes jurídicas, que la Fiscalía rusa accede a una entrega temporal. Este presunto capo de la mafia ruso-georgiana huyó de España en 2005, a raíz de la ‘operación Avispa’, en la que más de 400 agentes de la Policía Nacional detuvieron a 28 personas, bloquearon 800 cuentas bancarias e intervinieron numerosos activos inmobiliarios.
Posteriormente, fue detenido en Rusia en 2009 e ingresó en prisión, donde ha cumplido condena hasta que las autoridades rusas han accedido a entregarle a la justicia española.
Tariel Oniani ostentaba el rango de «vor v zakonen» -‘ladrón de ley’-, el más alto dentro de la criminalidad organizada en la ex URSS, que está penalizado en Georgia con hasta diez años de prisión.
Es uno de los líderes mafiosos más conocidos del espacio exsoviético y vivió en España desde principios de la década de 1990 hasta que en 2005 logró huir de las redadas policiales desarrolladas durante la ‘operación Avispa’.