Los conflictos de Afganistán y Libia y las tensiones en Oriente Medio y el norte de África ocuparán un lugar destacado en las conversaciones que mantienen hoy en Londres el presidente de EEUU, Barack Obama, y el primer ministro británico, David Cameron.
En el segundo día de su visita de Estado al Reino Unido, Obama pronunciará también un discurso sobre política exterior ante los miembros de las dos Cámaras del Parlamento en la llamada Westminster Hall, honor reservado normalmente a los monarcas británicos.
Aunque en ese salón gótico han hablado numerosos jefes de Estado- el último en hacerlo fue el papa Benedicto XVI, el año pasado-, Obama será el primer presidente de EEUU en tomar la palabra ante lores y comunes.
Mientras el presidente pronuncia allí su discurso, su esposa, Michelle Obama se trasladará a la Universidad de Oxford, donde asistirá a una jornada de puertas abiertas para alumnos de una escuela londinense que ya visitó en 2009, y a los que estimulará a aspirar a la enseñanza superior.
A las conversaciones políticas entre Obama y Cameron asistirá también, según se ha anunciado, el viceprimer ministro británico y líder del Partido Liberal Demócrata, Nick Clegg.
Tras esa reunión, el presidente y el primer ministro celebrarán juntos una conferencia de prensa conjunta antes de dirigirse al palacio de Buckingham para un almuerzo privado.
Por la noche, Obama y su esposa ofrecen una cena en la residencia del embajador estadounidense en el Reino Unido, a la que han sido también invitados la reina Isabel II y su esposo, el duque de Edimburgo.
El jueves por la mañana, Obama y Cameron viajarán a Francia para asistir a la cumbre de los países industrializados del G8 en Deauville (noroeste).