El serbo-croata Gorad Hadzic, el último acusado por el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), podría ser extraditado este viernes mismo hacia La Haya, donde tiene su sede dicha corte, tras rechazar este jueves apelar esta medida, según ha anunciado este jueves su abogado, Toma Fila.
Hadzic, detenido el miércoles en el norte de Serbia tras siete años fugado, ha renunciado por escrito a su derecho a apelar contra la sentencia que autoriza su extradición al TPIY emitida por el Tribunal Especial de Belgrado, ha indicado el letrado.
«Teniendo en cuenta que Hadzic ha renunciado a su derecho a apelar, se dan las condiciones para su extradición al TPIY», ha explicado a la prensa, según recoge la agencia serbia Tanjug. Pese a ello, el abogado no prevé que la extradición se produzca antes del viernes por la noche, lo que le daría tiempo suficiente para ver a todos sus familiares.
Según Fila, Hadzic ha podido ver hoy a su hijo, su hija y una hermana, que le han visitado, y para mañana está prevista la visita de su pareja sentimental y su hijo. El abogado ha aclarado que al margen de sus familiares, Hazdic no recibirá ninguna otra visita.
Por otra parte, ha indicado que el ex presidente de la República de la Krajina Serbia (la entidad serbia en Croacia) se encuentra en buen estado de salud, sabe de lo que se le acusa, pero no ha querido comentar el acta de acusación.
Fila ha explicado que en su primera comparecencia ante el TPIY, una vez en La Haya, Hadzic estará representando por un equipo de abogados de su oficina, sin que por el momento se haya decidido quién le defenderá. Fila no puede ser el abogado defensor del serbo-croata porque ya ha defendido ante el tribunal de La Haya al ex comandante Slavko Dokmanovic, acusado de crímenes de guerra en la localidad croata de Vukovar.