Las autoridades de La City londinense y de la catedral de San Pablo han anunciado este martes que renuncian, al menos temporalmente, a las acciones legales que habían iniciado para intentar desalojar el campamento de indignados levantado hace más de dos semanas junto al emblemático templo.
El cabildo catedralicio fue la primera de las instituciones en retirar una polémica iniciativa que ha supuesto la dimisión del deán. El obispo de Londres, Richard Chartres, ha confirmado la decisión asegurando que, ahora que las «señales de alarma suenan en todo el mundo», San Pablo también «ha oído esa llamada».
«La decisión de hoy significa que las puertas están más abiertas para afrontar los asuntos relativos no sólo a los acampados junto a la catedral, sino a millones de personas tanto en este país como en todo el mundo», ha explicado, en un comunicado recogido por la prensa británica. Los responsables de la catedral quieren comprometerse de forma «directa y constructiva» con los manifestantes.
La Corporación de la City de Londres se ha sumado posteriormente diciendo que quiere «dejar más espacio para una resolución» del conflicto, lo que, en la práctica, supone «dejar en pausa» la búsqueda de una orden judicial que autorice el desalojo.
El responsable del órgano municipal, Stuart Fraser, ha vinculado la retirada de la iniciativa con el paso dado previamente por la Iglesia. «Debido al cambio, hemos presionado el botón de pausa sobre las acciones legales», con el objetivo de apoyar a la catedral, «una importante institución nacional», y «dar tiempo a la reflexión», ha resumido Fraser.
No obstante, el jefe de La City ha advertido de que no se trata de un repliegue definitivo, ya que dejarán un margen «probablemente de días, no de semanas». En este periodo, debería lograrse una «solución», si bien Fraser ha aclarado que este miércoles darán más detalles de los planes que tienen sobre la mesa.
Tanto La City como la catedral de San Pablo habían anunciado el viernes pasado su intención de forzar el desalojo del campamento, integrado por alrededor de 200 tiendas. El movimiento ‘Occupy London’ lleva a cabo esta protesta desde el pasado 15 de octubre.