Al menos 30 personas han fallecido este jueves a causa de un bombardeo del Ejército turco en el sureste del país, cerca de la frontera con Irak, según ha informado un funcionario local.
«Tenemos 30 cadáveres, todos de ellos quemados. El Estado sabía que estas personas estaban llevando a cabo operaciones de contrabando en la región», ha dicho Fehmi Yaman, alcalde de la localidad de Uludere, en la provincia de Sirnak. Hasta el momento no hay más detalles del incidente.
El Ejército turco suele llevar a cabo operaciones en la región contra militantes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), considerado como una organización terrorista por Ankara.