lunes, noviembre 25, 2024
- Publicidad -

Carla Bruni, bajo sospecha

No te pierdas...

Ante las acusaciones recibidas por parte de la revista Marianne, la primera dama francesa ha decidido defenderse, a través de un comunicado, en el que asegura que el dinero de la Fundación Carla Bruni-Sarkozy proviene de subvenciones públicas. La revista francesa Marianne asegura que la Fundación Carla Bruni-Sarkozy, dedicada a la lucha contra el analfabetismo, habría recibido irregularmente tres millones y medio de euros del Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y el Paludismo, según publica ¡Hola!.

Al parecer, ese fondo, del que la mujer del presidente de Francia es embajadora, transfirió el dinero «al margen de la legalidad, sin licitación, a petición de la primera dama de Francia y a varias empresas de uno de sus amigos», Julien Civange, músico, hombre de negocios y también consejero y testigo de boda de Sarkozy y Bruni.

Harta de estas acusaciones, Carla ha decidido dar su versión de los hechos: «La insinuación según la cual se habrían obtenido fondos de socios públicos no tiene ningún fundamento», insistiendo en que tiene «una contabilidad limpia».

La primera dama francesa asegura que «nunca ha existido» una ayuda del Ministerio francés de Cultura a través del Centro Nacional del Libro y también que la organización ocupa unas oficinas por las que paga alquiler. Sin embargo, no menciona para nada al Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA.

La trayectoria de la fundación Carla Bruni-Sarkozy

La esposa de Nicolás Sarkozy va un paso más allá y recuerda que su fundación ha conseguido en dos años y medio «cerca de ocho millones de euros de donantes y socios» que le permiten «llevar a cabo sus acciones». Además, recuerda que ayudan a 800 familias y que en los últimos 18 meses han dedicado unos 800.000 euros a asociaciones especializadas en la lucha contra el analfabetismo.

Por su parte, el Fondo Mundial también niega las informaciones de la revista Marianne y uno de sus portavoces ha declarado que Carla Bruni había pedido a su amigo Julien Civange que la representara y desarrollara un concepto de cómo podría usarse el ocio para difundir la lucha contra el SIDA.

A partir de ahí, el Fondo se comprometió a pagarle a Julien y otros cuatro empleados 580.000 euros en 18 meses por desarrollar la campaña. «Como parte del proceso, el señor Civange aportó contribuciones valoradas en 20,4 millones de dólares a través de colocaciones gratuitas en medios, anuncios y trabajo creativo», añadió.

Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimas noticias

- Publicidad -