El presidente francés Nicolas Sarkozy tuvo que pedir disculpas a un agente de policía después de que su hijo menor, de 15 años le lanzara un tomate y bolas de papel, desde el palacio presidencial del Elíseo.
Louis, hijo del mandatario galo y su exmujer Cecilia Ciganer, golpeó en el rostro al policía con el tomate. Tras el incidente, la oficial de policía preguntó a los gendarmes que custodian las puertas del Palacio del Elíseo, de dónde procedían los ataques, y los agentes señalaron de inmediato a Louis Sarkozy y a sus amigos.
Nicolás Sarkozy se divorció de la madre de Louis, Cecilia, en 2007 poco después de ser elegido como presidente. Años más tarde se casó con la modelo Carla Bruni, con la que ha tenido una niña el año pasado.
La gamberrada de ‘petit Louis’ y sus amigos le puede salir muy cara al presidente galo, que se encuentra en la campaña electoral de presidenciales francesas del próximo mes de mayo, y en las que todos los sondeos le sitúan por detrás del socialista Francois Hollande.
Estrella Digital