El exprimer ministro sirio Riad Hijab, que dimitió la semana pasada de su cargo por sus diferencias con el régimen de Bashar al Assad, ha asegurado este martes en su primera rueda de prensa tras la deserción que el presidente del país es un «enemigo de Dios» y que su Gobierno «se desmorona».
En su primera comparecencia tras abandonar el gobierno para sumarse a la causa de los rebeldes, Hijab ha afirmado que el régimen «se desmorona» tanto en el frente militar como desde el punto de vista «moral» y «financiero».
«¡Oh revolucionarios devotos! Su revolución se ha convertido en un modelo de esfuerzo y sacrificio por el bien de la libertad y la dignidad. Aseguro, por mi experiencia y mi anterior posición, que el régimen se derrumba, espiritual y financieramente», ha dicho en una conferencia de prensa en Amman, capital de Jordania.
Según Hijad, el régimen de Al Assad «no controla más del 30 por ciento del territorio sirio» lo que significa que «la revolución brilla para ser completada para preservar la unidad del país», según cita Reuters.
La dimisión de Hijab, quien abandonó su cargo a comienzos de agosto, representa la deserción más importante sufrida por el régimen sirio desde que comenzaron las revueltas, hace 17 meses. Sin embargo, Al Assad ha querido restar importancia a la salida de su primer ministro nombrando inmediatamente a un sustituto y aparentando, a través de sus medios oficiales, normalidad en la acción de gobierno.
«Es mi deber lavar mis manos de este régimen corrupto», ha dicho Hijab a los medios aunque sin responder a ninguna pregunta de los periodistas.
Unir fuerzas
Hijab ha agradecido a los países como Turquía, Arabia Saudí y Qatar por su apoyo y les ha pedido más ayudas para la oposición que intenta poner fin al régimen de Al Assad. «Les hacemos un llamamiento a continuar apoyando la rebelión de los benditos y llevarlos a una victoria segura», ha dicho.
Así, ha extendido un mensaje al Ejército Libre Sirio a «unificar sus filas» porque «todas las esperanzas» están puestas sobre ellos. «Ustedes son los mejores luchadores de este mundo», ha expresado.
En este sentido, el primer ministro desertor ha urgido a las fuerzas leales a Al Assad a deponer las armas y seguir el «ejemplo de los ejércitos de Egipto y Túnez y ponerse del lado del pueblo sirio», según cita la BBC.