El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha dicho que está dispuesto a negociar con Reino Unido dos posibles soluciones al caso del fundador de Wikileaks, Julian Assange: la concesión de un salvoconducto o la garantía de que, una vez en Suecia, donde se le investiga por varios delitos sexuales, no será extraditado a un tercer país.
En un encuentro con la prensa internacional, Correa ha expresado su voluntad de dialogar con Reino Unido, «no para negociar principios», sino para buscar una solución a la situación de Assange, que lleva un mes refugiado en la Embajada de Ecuador en Londres para evitar que sea extraditado a Estados Unidos.
«Las dos opciones serían: que Reino Unido conceda un salvoconducto (para que el fundador de Wikileaks pueda viajar a Ecuador, que le ha concedido el asilo diplomático) o que dé garantías claras de que no será extraditado a un tercer país», ha explicado, en declaraciones recogidas por la cadena TeleSur.
Entretanto, ha reiterado su oferta de que un fiscal sueco interrogue a Assange en la misión diplomática por los supuestos delitos sexuales que ha cometido. «Ecuador nunca ha dicho que no contribuiría a la investigación, ni él ha dicho que no respondería a la acusación», ha apuntado.
Si bien, el mandatario ha indicado que, a la espera de que Reino Unido acepte la oferta de diálogo, Ecuador seguirá con su estrategia para solucionar el problema por la vía diplomática, lo que podría incluir, según ha señalado, la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Relaciones bilaterales
Interrogado por la amenaza de Reino Unido de asaltar la Embajada de Ecuador en Londres para detener a Assange y extraditarle a Suecia, el presidente ha reiterado que, de materializarse, «la mayor perdedora sería la nación británica».
«Sería algo gravísimo para Reino Unido porque ellos tienen muchas más embajadas que nosotros y todos los países (receptores) podrían violentarlas», ha dicho, en una rueda de prensa celebrada en la ciudad de Guayas (suroeste).
Además, ha revelado que ha llegado a pensar «que fue un desliz de Reino Unido, porque el pueblo británico no es así». «Siempre hemos mantenido el diálogo con Reino Unido por eso nos sorprendió una amenaza tan grosera, desconsiderada e inaceptable. No esperamos disculpas, solo que se retracten», ha aclarado.
Así, ha considerado que este incidente no debería perjudicar a las elaciones bilaterales. «Si América Latina empezara a ponerse brava con todos los países que han concedido asilo diplomático evitando que delincuentes comunes respondan ante la justicia, estaríamos bastante enojados con varios países del resto del planeta», ha sostenido.
«Si Reino Unido se distancia de Ecuador por haber concedido asilo diplomático, nos apenará muchísimo», ha aseverado. «Pero Ecuador no claudicará su soberanía ante nada ni ante nadie. Tenemos todo el derecho de conceder asilo diplomático en los casos que creamos conveniente sin pedir permiso a nadie», ha subrayado.