Corea del Norte ha declarado nulos todos los acuerdos de no agresión suscritos con Corea del Sur, según ha anunciado este viernes el Comité para la Reunificación Pacífica de Corea en un comunicado publicado en la agencia de noticias KCNA.
Además, el órgano propagandístico del régimen comunista ha indicado que, como consecuencia de la anulación de dichos acuerdos, «cerrará el canal de enlace entre el Norte y el Sur ubicado en la localidad fronteriza de Panmunjon».
En este contexto, el líder norcoreano Kim Jong Un ha visitado a las unidades militares que el 23 de noviembre de 2010 bombardearon la isla surcoreana de Yeonpyeong, ubicada en el mar Amarillo, acabando con la vida de cuatro personas: dos civiles y dos militares.
Kim ha instado a las tropas norcoreanas desplegadas en los islotes de Mu y Jangjae a estar preparadas para destruir al enemigo, una vez sea dada la orden.
El anuncio llega horas después de que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas haya aprobado por unanimidad una resolución para ampliar las sanciones económicas y financieras contra Corea del Norte por la prueba nuclear que llevó a cabo el pasado 12 de febrero.
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha considerado que la resolución «envía un mensaje inequívoco a Corea del Norte en el que informa de que la comunidad internacional no tolerará su actividad nuclear».
La resolución de este jueves es el resultado de tres semanas de intensas negociaciones en el seno del Consejo de Seguridad y, sobre todo, de un acuerdo entre Estados Unidos y China, principal aliado de Corea del Norte.
Pyongyang había advertido de que, si el Consejo de Seguridad aprobaba nuevas sanciones en su contra, llevaría a cabo más pruebas nucleares y con misiles balísticos, subrayando que es capaz de alcanzar Seúl y Washington.
En respuesta, la Casa Blanca ha asegurado que Estados Unidos es «perfectamente capaz» de defenderse de una potencial agresión de Corea del Norte, subrayando que «no logrará nada mediante amenazas y provocaciones».